Interior quiere rebajar la tasa de alcoholemia al 0,2
La tasa de alcohol permitida a los conductores pasará en España del actual 0,5 al 0,2 (gramos por litro de sangre) si se abre paso una reforma del Reglamento de Circulación que quiere llevar a cabo el Ministerio del Interior. Este jueves ha hecho el titular de la cartera, Fernando Grande-Marlaska, un anuncio en este sentido durante un desayuno del Foro Nueva Economía celebrado en Madrid. Con la medida, ha dicho Marlaska, se quiere imitar la seguridad extremada en países europeos con menores tasas de siniestralidad en el tráfico rodado.
Interior quiere “impulsar” un debate político acerca de esta reforma, ha explicado Marlaska, que tiene previsto su envío al Congreso. La tasa de alcoholemia permitida pasaría al 0,2 en sangre y también se reduciría la presencia consentida en el aire espirado, las pruebas de soplado, en las que la tasa tope bajaría del 0,25 (miligramos de alcohol por litro de aire) hasta el 0,10, abundan fuentes de Interior.
Marlaska ha hecho el anuncio sin descender a estos detalles más técnicos, y después de subrayar que este cambio normativo se lanza desde Interior tras escuchar a las víctimas de los accidentes en carretera. La medida se toma, indican las fuentes consultadas en Interior, tras escuchar las reclamaciones de colectivos como la Asociación Stop Accidentes, la Fundación Mapfre, la Asociación Española de la Carretera o la dirección de Tráfico del gobierno navarro, entre otras.
Medida ampliada
En su comparecencia pública, Marlaska ha recordado que “alcohol y drogas están presentes en más de la mitad de los accidentes”, y, recogiendo el sentir y el en foque de las víctimas de estos siniestros, ha redefinido el concepto: “No son accidentes, es violencia vial”, ha enfatizado.
Esta medida ya se consideró en el pasado mes de junio, si bien entonces la contemplaba Interior para aplicársela a los conductores noveles -una de las franjas donde más incidencia tiene el acohol al volante- y los profesionales del transporte de viajeros o mercancías. Ahora la ambición de la media crece: se planea aplicársela a todos los poseedores de carnet de conducir.
La ambición de la medida creció este verano, en el trámite de audiencia de la Dirección General de Tráfico (DGT) a los afectados. Las asociaciones comunicaron a la DGT que no era lógico desde el punto de vista de la seguridad vial permitir a unos conductores beber más que otros. En Interior encontraron que esa opinión es un clamor entre los colectivos de damnificados por accidentes.
La reforma que se quiere llevar a las cámaras tocará el artículo 20 del Reglamento de Tráfico, el que contempla los límites de la bebida cuando se conduce. Marlaska se ha mostrado convencido de que “la sociedad española está madura” para aceptar esta medida.
Mortalidad
Las tasas de alcohol por encima de lo permitido están presentes en el 26% de los accidentes mortales en carretera, según datos de la DGT. Pero el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses ha realizado estudios que concluyen que el alcohol, ya sea por debajo o por encima de la tasa legal, participa en el 33% de los accidentes con muertes.
La alcoholemia en la conducción llevó a la emisión de más de 50.000 sentencias condenatorias el año pasado, según la Memoria de la Fiscalía, recientemente publicada.
De forma complementaria a esta reforma del Reglamento de Circulación, la DGT está embarcada en una sucesión de campañas para desterrar en España la idea permisiva de que existe un consumo moderado de alcohol a la hora de conducir, tratando de extender la conciencia de que, al volante, no hay consumo pequeño.
Hay referencias europeas en las que se fija Interior al estudiar este asunto. Fuera de la UE, Noruega. Centro, Suecia, Polonia o Estonia, también con límites del 0,2. Otros países, como Rumanía y Chequia, no permiten más que un cero de alcohol en sangre cuando se sale a la carretera.