Audi A6 e-tron: nuevos estándares en diseño y autonomía
Las berlinas dominaron durante una larga época las carreteras europeas con su porte y elegancia. La llegada de los SUV las ha ido relegando, pero a pesar de ello, no pierden su vistosidad y saber estar. Este tipo de vehículos es un clásico en Audi. Mantiene su apuesta por este tipo de vehículos, que son especiales en las marcas premium.
La firma de Ingolstadt lanza al mercado el primer A6 eléctrico, el A6 e-tron, y lo hace como Sportback y como Avant, un modelo muy popular en el norte de Europa. Toda buena berlina tiene que ser grande, y este A6 e-tron lo es. Mide 4.93 metros de largo, 1.92 de ancho y de altura 1.49 en el caso de Sportback y 1.53 el Avant. Todo ello con una batalla de 2.95 metros, que se reflejan en un interior amplio y cómodo para viajar.
Frontalmente detectamos que estamos ante un vehículo eléctrico con la parrilla “Singleframe” cerrada e invertida, ya que el motor no necesita ventilación. El capó, que es largo y poderoso, cuenta con unos intensos nervios que enfatizan su carácter deportivo, y sus faros son delgados y afilados. En la parte inferior están las entradas de aire, que tienen una forma tridimensional.
Puede incorporar los espejos retrovisores virtuales de segunda generación, que incorpora una cámara en lugar de los tradicionales espejos, y su imagen se refleja en una pantalla que se incorpora en el lateral de la puerta.
Lateralmente destacan sus llantas de 20 pulgadas, que son de serie, aunque de opción las hay de 19 y 21 pulgadas. Además, cuenta con ocho colores diferentes. La zaga integra un llamativo alerón y presenta una silueta afilada y deportiva. Las luces traseras se unen mediante una franja iluminada, que está situada por debajo de los característicos cuatro aros de Audi que, en esta ocasión, se iluminan de noche, con lo que es fácil darse cuenta que estamos ante un vehículo premium.
Que es un coche grande lo demuestra la capacidad de su maletero, con 502 litros, con los asientos en su posición normal. Si los abatimos, en el Sportback ampliamos su capacidad hasta los 1.330 litros, y en el caso del Avant hasta los 1.422 litros. Y a pesar de ser eléctrico, cuenta con una capacidad de remolque de 2.100 kilos.
En su interior, destacan las tres pantallas con las que cuenta. Un tras el volante, 11,9 pulgadas; una central orientada hacia el conductor de 14,5 pulgadas, y una tercera frente al copiloto de 10,9 pulgadas. Esta última permite conectarse a internet, ver vídeos e, incluso, disfrutar de una gratificante sesión de karaoke. Y todo ello sin que el conductor pueda ver nada, al contar con una pantalla especial.
Incorpora un head up display con realidad aumentada, lo que hace muy fácil seguir las instrucciones de navegación. Además, refleja otras informaciones que necesitamos a la hora de la conducción.
Cuenta con cuatro versiones disponibles. El A6 e-tron cuenta con una batería, bruta, de 83 kWh, con una autonomía que llega a los 624 kilómetros en la versión Sportback. La versión performance, quattro y S6 quattro, cuentan con una batería de 100 kWh, y en autonomías podemos llegar a los 714 kilómetros, con unas velocidades máximas de hasta 240 km/h. En lo que a potencias se refiere, arrancan en los 285 CV, pasando por los 367 CV del performance, 428 CV del quattro y los 503 CV del S6 e-tron quattro.
En carretera es difícil sacarle algún, pero a este vehículo. A pesar de sus dimensiones se maneja fácilmente, con un paso por curva firme y una gran capacidad de recuperación.
Como es lógico, todos los vehículos vienen con etiqueta medioambiental “Cero”, y los precios van desde los 67.980 euros del Audi A6 e-tron Advanced, hasta los 104.310 euros de la versión S6 e-tron quattro.