Audi RS e-tron GT: el deportivo eléctrico que sí querrás tener
El Audi RS e-tron GT comparte gran parte de su desarrollo con el Porsche Taycan, las dos armas que el grupo Volkswagen ha creado para plantar cara a rivales como el Tesla Model S o el Mercedes-Benz EQS. El modelo de los aros se diferencia del de Stuttgart por una puesta a punto más burguesa de diseño elegante y atemporal, junto a un equilibrio superior de sus cualidades pero menos deportivo. La versión más prestacional alcanza los 646 CV de potencia, pero su excelencia va mucho más allá de la caballería. En este artículo os cuento como una petrolhead, que soñaba con ser propietaria de un Audi RS3, se ha enamorado del futuro eléctrico de esas siglas.
La gran mayoría de españoles está concienciado y preocupado por el medioambiente, pero no tienen una cuenta corriente que les permita una casa unifamiliar o la instalación en su parking de un punto de carga. Mucho menos, claro está, la compra de un modelo como el Audi RS e-Tron GT, que parte de los 146.000 euros.
Como sucedía y sucede con los superdeportivos, el refinamiento, las emociones y la pasión al volante llega acompañada de unos cuantos ceros. Por desgracia, con la electrificación no será diferente y habrá que sumar el proceso de carga, detalle que limita a ser propietario de estos coches solo si puedes cargarlo en casa.
Depender de la carga pública es una temeridad que, tras comprobarlo durante una semana, desdibuja la diversión que puede otorgar un coche así. Más aún cuando hablamos de una autonomía homologada de 472 kilómetros que realmente no serán más de 350 kilómetros. Se debe, en gran parte, al consumo nada bajo de 25,4 kWh/100 km que mostraba el marcador y que, con una batería de 85 kWh de capacidad neta, te obligará a planear muy bien tus viajes. Según Audi, alcanza 270 kW de corriente continua y tarda solo 23 minutos en alcanzar el 0 a 80%, pero encuentra tu un cargador así y págalo... ¡Preferirás la gasolina!
Ahora lo bueno...
No sé vosotros, pero yo siempre prefiero las noticias malas primero. Ya os las hemos dado: precio y consumo o autonomía real. Ahora empieza lo bueno. El RS e-tron GT es un coche grande, de 4,98 metros de largo por 1,96 m de ancho y 2,9 m de distancia entre ejes, pero muy bajo (1,41 m). Su silueta es tan bella como eficaz en su apartado aerodinámico, pero no es lo más recomendable para viajar atrás pese a sus 350 litros de maletero (más 81 delante).
En las plazas delanteras, en cambio, sientes una amplitud excelente, acompañada de unos acabados de vanguardia, posición de conducción ultrabaja y dotación tecnológica de lujo. Hablo de las 12,3 pulgadas de pantalla de instrumentación configurable, junto a la táctil de 10,1 pulgadas orientada al conductor compatible con Apple CarPlay de manera inalámbrica.
Me gusta que todavía tenga algunas funciones en botón, como la climatización bajo la pantalla y los modos de conducción, asistente de aparcamiento y luces de emergencia en la consola. Pero más me conquistó todavía su color Deep Green del departamento Audi Exclusive, un tono verde inglés muy oscuro que solo los más atentos percibieron y que destacaba frente a las llantas de aleación ligera de diseño trapezoidal de 10 radios y 21 pulgadas.
Así sí me paso a lo eléctrico
Las siglas RS le conceden al e-tron la chicha que le falta a la versión “normal”, que me pareció algo aburrida durante su prueba. Los reajustes en el chasis, sumados a la suspensión neumática, la dirección a las cuatro ruedas y el diferencial autoblocante trasero (electrónico) lo acercan tímidamente al Porsche Taycan Turbo, sin alcanzarlo.
Audi ha apostado por un refinamiento superior, enfocado al conductor que aprecia las bondades de viajar en primera clase, con una insonorización digna de la cancelación de ruidos y una respuesta agradable del pedal del acelerador, la dirección y la suspensión.
Con esto no quiero decir que el RS e-tron sea naíf, pero sí más burgués y cómodo. Los 2.420 kilogramos de peso se dejan notar en los tramos de curva, pero sus reacciones son ágiles, rápidas y muy eficaces. Solo deberás tener en cuenta el dato a la hora de frenar, uno de los aspectos más dramáticos del Audi frente al Taycan. Básicamente, porque correr, no podemos correr con ninguno de ellos y ambos son balas eléctricas.
El RS alcanza los 250 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 3,3 segundos, 0,1 segundo menos que el Taycan Turbo que cuesta casi 10.000 euros más de base. La unidad probada del RS e-tron GT se dispara a los 162.000 euros con los opcionales.