Mercedes-Benz EQA y EQB: más eléctricos y digitales
La nueva era de la electrificación no espera a nadie. La constante evolución de esta tecnología convierte el mercado del automóvil en un hervidero de novedades, así que no sorprende hablar de un restyling antes de tiempo. Los Mercedes-Benz EQA y EQB apenas llevan dos años en nuestras carreteras, pero la firma de la estrella los quiere todavía más jóvenes, tecnológicos y eficientes. Un ligero lavado de cara que también implica un frontal rediseñado, el nuevo sistema MBUX y una experiencia de sonido basada en las salas de cine.
Los primeros EQA y EQB debían ser fácilmente identificables por parte del público, dado que deben ser la puerta de entrada al mundo eléctrico de Mercedes-Benz. Tras un tiempo prudencial, estos todocaminos pueden mostrarse 100% cero emisiones y sin complejos.
Por ese motivo comparten un frontal completamente ciego y negro, una superficie minimalista que cambia su patrón en función del nivel de acabado. De este modo, la estrella en el centro cobra más protagonismo. El salto tecnológico va un paso más allá con la fina tira luminosa que conecta ambos faros diurnos, más horizontales que en el modelo anterior. Los pilotos traseros, en cambio, mantienen la misma configuración y la banda que cruza el portón.
El habitáculo muestra las últimas novedades de los eléctricos de Mercedes-Benz, así que encontramos un volante rediseñado, con controles táctiles a ambos lados. También incorpora las inserciones en madera de poro abierto y los patrones retroiluminados en el salpicadero, que incluye la última generación del MBUX con pantallas personalizables: discreto, deportivo y clásico.
Por último, pero no menos importante para muchos, los nuevos Mercedes-Benz EQA y EQB adoptan el mismo sistema de sonido envolvente Burmester®. Es un extra que, junto con la nueva generación MBUX, ofrece la experiencia de audio Dolby Atmos que se adapta al entorno de reproducción para asemejar al sonido de un estudio de grabación. Este sistema mejora las configuraciones acústicas individuales, llamadas Sound Experiences, que implican acciones como la bienvenida o despedida a la hora de apagar el coche.
Más eficientes y ruteros
En el caso del Mercedes-Benz EQA, esta nueva hornada llega con hasta 560 kilómetros de autonomía. Un ligero aumento derivado de las mejoras en la aerodinámica y la elección de neumáticos con baja resistencia a la rodadura, además de una función especial para reducir el consumo de energía del aire acondicionado o los sistemas de confort.
Además, y como ya hemos visto en otras novedades de la estrella, estos todocaminos compactos contarán con la función Plug & Charge de Mercedes me Charge, que agiliza el proceso de carga al no necesitar autenticarse en algunos puntos habilitados, ya que el vehículo y la estación de carga se comunican directamente a través del cable.
Por otro lado, el Mercedes-Benz EQB estrena un enganche con estabilización con ESP como opción, por lo que podremos remolcar hasta 1.700 kilogramos. El ESP también entra en juego al hablar de las mejoras en el apartado de seguridad, dado que formará parte del asistente activo de mantenimiento de carril para una actuación más confortable.