Probamos el Mitsubishi Space Star, el perfecto urbanita
Es fácil asociar a Mitsubishi con el segmento SUV gracias a modelos como el Eclipse Cross o el Outlander, este último uno de los híbridos enchufables más vendidos de Europa. Sin embargo, en el fondo de su oferta hay un pequeño coche urbano, el Space Star, que pese a no ser tan popular es su modelo más vendido en España este año. Sus características lo convierten en uno de los coches más efectivos para circular por ciudad y un duro rival en el segmento B.
De hecho, es un coche creado por y para la ciudad, para lo bueno y para lo malo, destacando como un vehículo de fácil manejo y maniobrabilidad pero con marcadas carencias a la hora de tomar más velocidad. Por ejemplo, su motor de 71 CV no tiene problemas para colocar la aguja en los 50 km/h, de hecho lo hace bastante rápido, y su transmisión CVT mantiene siempre el motor calmado y el consumo bordeando los seis litros. No obstante, este mismo motor, sin turbo, sufre más para pasar por los 100 km/h y más aún para alcanzar los 120 km/h, con la transmisión disparando las revoluciones al demandar potencia de un modo poco eficiente que incrementa el consumo y, sobre todo, el ruido.
Cómodo y suave en ciudad
Lo mismo ocurre con el interior, pensado para cubrir las necesidades del conductor urbano. No es un habitáculo especialmente amplio, aunque cuatro adultos altos pueden viajar sin demasiados problemas gracias al espacio de la banqueta trasera. La posición de conducción es cómoda, pero los conductores altos pueden tocar con la cabeza en el techo, hecho que solo se puede corregir inclinando el respaldo del asiento, porque no tiene ajuste de altura. El plástico y los materiales duros dominan el entorno, para reducir el coste del coche, pero todo encaja y el acabado es bueno, con lo que la sensación no es para nada negativa.Mitsubishi apuesta por un diseño limpio, con todos los controles bien distribuidos de forma intuitiva para gestionar su sistema de infoentretenimiento de forma sencilla. El sistema operativo no tiene navegador y, pese a que navegar entre menús es rápido, agradecería una actualización. Es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. El cuadro de instrumentos presenta dos indicadores analógicos y una pequeña pantalla central con información adicional. Simple y fácil de usar.
En marcha, el Space Star es un coche cómodo, sensación que se prolonga mientras se circula en ciudad, donde la experiencia de conducción es muy satisfactoria. Al salir a vía rápida flaquean la potencia y la recuperación, aunque se pueden alcanzar velocidades de crucero. El problema en ese sentido será el ruido, tanto del motor como del aire, que se oye sobremanera. Los pasajeros seguirán disfrutando de un alto grado de confort incluso a velocidades altas y en todo tipo de carreteras porque la suspensión filtra bien, aunque en vías reviradas peca de un balanceo más acusado.
El Mitsubishi Space Star se presenta así como un gran vehículo urbano para el día a día, aunque para salir de la ciudad debería quedar como la alternativa. La unidad probada, con transmisión automática, parte desde los 14.850 euros.