Los Nissan eléctricos costarán lo mismo que los gasolina
Nissan quiere que sus coches eléctricos cuesten lo mismo que los de gasolina. Este objetivo es fundamental para llevar a cabo su estrategia de electrificación total Nissan Ambition 2030, y pasa por utilizar baterías de estado sólido en sus vehículos, ya que la batería es precisamente el componente más caro de un coche eléctrico. Nissan cree que las baterías de estado sólido pueden reducirse a 75 dólares por kWh durante el ejercicio fiscal 2028 y a 65 dólares por kWh a partir de entonces, lo que permitiría abaratas radicalmente los precios de los vehículos con motores eléctricos.
Para poder hacerlo esto posible, la compañía japonesa ha presentado el prototipo de una planta de producción de baterías laminadas de estado sólido, que Nissan pretende lanzar al mercado en 2028, junto con su primer coche dotado de esta tecnología. El objetivo de la marca nipona es establecer una línea de producción piloto en su planta de Yokohama durante el ejercicio fiscal 2024, en la que se estudiarán los materiales, el diseño y los procesos de fabricación para la producción de prototipos en la línea.
Nissan cree firmemente que las baterías de estado sólido serán una tecnología que cambie las reglas del juego para popularizar definitivamente los vehículos eléctricos, al igual que apuesta ahora por su tecnología e-Power. Las baterías de estado sólido tienen una densidad de energía que duplica aproximadamente la de las baterías de iones de litio convencionales, un tiempo de carga mucho más corto, y un coste menor gracias a la posibilidad de utilizar materiales más baratos. Con estas ventajas, Nissan espera utilizar las baterías de estado sólido en una amplia gama de segmentos de vehículos, incluidas las pick-up, haciendo que sus vehículos eléctricos sean más competitivos.
Según Kunio Nakaguro, vicepresidente ejecutivo de Nissan a cargo de I+D: «Nissan ha sido líder en tecnología de electrificación a través de una amplia gama de actividades de I+D, desde la investigación de materiales para baterías a nivel molecular hasta el desarrollo de vehículos eléctricos seguros y de alto rendimiento. Nuestras iniciativas incluyen incluso el desarrollo urbano utilizando los VE como baterías de almacenamiento. Los conocimientos adquiridos gracias a nuestra experiencia respaldan el desarrollo de las baterías de estado sólido y hemos acumulado importantes tecnologías elementales. En el futuro, nuestras divisiones de I+D y de fabricación seguirán trabajando juntas para utilizar este prototipo de instalación de producción y acelerar la aplicación práctica de las baterías de estado sólido».
¿Qué son las baterías en estado sólido?
Como ya explicamos en este reportaje, las baterías de estado sólido son capaces de ofrecer una mayor autonomía para los vehículos eléctricos, más seguridad en caso de accidente y un tiempo de carga mucho menor. Además, su mayor densidad permite que con un tamaño menor que las de ion-litio, ofrecer hasta un 70% más de capacidad en el mismo espacio.Se espera que los coches con baterías en estado sólido sean una realidad en 2025, sin bien tardarán unos 5 años en popularizarse y montarse de forma global en los coches, por lo que estaríamos hablando de 2030.
El principal reto al que se enfrentan los ingenieros para crear la batería en estado sólido perfecta, es encontrar el material perfecto para el electrolito. Según las primeras informaciones, las soluciones actuales no alcanzan los estándares de conductividad, capacidad, seguridad o vida útil deseados por los fabricantes. Es por eso que hay tantos fabricantes involucrados en el desarrollo a sabiendas que el que encuentre antes la fórmula tendrá una ventaja competitiva importante durante un período de tiempo.