Toyota bZ4X: el primer coche eléctrico de la firma japonesa
En los últimos años, Toyota se ha convertido en un referente en la hibridación, uno de los aspectos por los que lidera el mercado español. El fabricante nipón se resistía a iniciar la producción de vehículos eléctricos, aunque trabajaba en la sombra en una serie de modelos cuyo primer lanzamiento es el bZ4X, su primer vehículo 100% eléctrico.
En lo que diseño se refiere, es un modelo que aúna singularidad, estética y agresividad, sobre todo en su parte frontal. Es un SUV de 4.69 metros de largo, 1.86 de ancho y 1.60 de alto. Destaca su batalla de 2.85 metros, lo que le permite ubicar de forma correcta su batería de iones de litio.
Como todo vehículo eléctrico, carece de parrilla frontal ya que no hay nada que refrigerar, aunque en su parte inferior sí que incluye una pequeña parrilla con bordes plásticos. El capó es grande y pronunciado, y llega hasta unos pases de rueda en donde el plástico duro es el gran protagonista. En los laterales de la parte frontal cuenta con unas entradas de aire que, además de estéticas, ayudan a refrigerar unos frenos que también podemos utilizarlos para cargar la batería.
En los laterales destacan las nuevas llantas, que pueden ser de 18 o 20 pulgadas, y en un modelo como este sí que es importante su elección, ya que cuanto más grande sean, más penalizará la autonomía. La zaga es, cuanto menos, peculiar, ya que las luces van unidas por una banda en color rojo que va de lado a lado, y que se prolongan en su parte inferior en una moldura que acaba en forma de flecha, y que le imprime carácter.
Cuanto menos es también curioso el diseño de la parte superior del portón. Incorpora dos “orejas de gato” en los extremos, que ayudan a la aerodinámica, con una antena en forma de aleta de tiburón en su parte superior.
En el interior destacan dos aspectos, en otros, curiosos. Por un lado, es un modelo que no cuenta con guantera, por lo que tendremos que echar mano de los muchos huecos con los que cuenta el vehículo para guardar la documentación. Otra de las peculiaridades, es el selector del cambio. Tiene un formato que se sale de lo habitual, pero que cuenta con una gran ventaja, y es que no te vas a equivocar a la hora de seleccionar la marcha, ya que hacia un lado es la marcha hacia adelante, y al contrario la marcha atrás. El punto muerto es pulsando un botón que hay en el centro. Todo un acierto.
La capacidad de la batería es de 71,4 kWh, y se ofrece en dos potencias. La de entrada es un 4x2 con un motor de 204 CV, que son 150 kW; y otra versión 4x4 con dos motores que suman 218 CV y con una configuración de 80+80 kW. A la hora de hablar de autonomías, podemos hacerlo de una horquilla que va desde los 418 hasta los 506 kilómetros. En lo que a la recarga se refiere, el 80% lo podemos conseguir en treinta minutos.
En carretera, el bZ4X nos sorprendió gratamente. Le hicimos una prueba de unos doscientos kilómetros, en donde la mitad fueron por carreteras reviradas, con muchas curvas y en donde no podíamos exceder los límites de velocidad. Es un coche silencioso, cómodo de conducir, y con unos consumos realmente sorprendentes. La marca nos habla de un consumo medio de 18,1 kWh cada cien kilómetros, y durante muchos kilómetros conseguimos reducir, de forma importante, ese dato, llegando a hacer una media de 14,8 kWh.
Evidentemente la situación varió en el momento en el que entramos en autovía y las curvas eran más amplias y no se frenaba tanto como en el tramo anterior. Aún así, y superar los límites de velocidad marcados, el consumo medio llegó a los 19,1 kWh a los cien kilómetros.
Toyota nos ofrece dos acabados, Advance y Style Plus. El primero con llantas de 18 y el segundo con veinte, y con unos amplios equipamientos. La horquilla de precios va desde los 42.000 hasta los 49.000 euros tras el reposicionamiento de precios que la marca hizo en el mes de enero. Precios sin ayudas, ya que en el de partida, si descontamos el plan Moves, el achatarramiento, la deducción del IRPF y las ayudas, el precio baja hasta los 32.000 euros. Si usamos la fórmula de Toyota Easy Plus lo tenemos por 275 euros al mes, en una operación a cuatro años con cuatro mantenimientos incluidos. Y si queremos renting, Kinto One lo ofrece por 476 euros al mes, más IVA.