Tres aspectos clave en la recarga de un coche eléctrico
En un coche eléctrico o híbrido enchufable, es tanto o más importante la recarga que la autonomía. Por ello vamos a analizar tres aspectos básicos de esta operación: lugar, frecuencia y coste.
Lugar de la recarga
EN CASA
Como citábamos en el reportaje sobre si te conviene o no un coche eléctrico, nosotros no recomendamos un coche electrificado si no se tiene un punto de recarga de fácil acceso, y con ello nos referimos principalmente a una plaza de garaje con cargador en nuestro propio hogar, o en su defecto en la oficina.
Carga estándar. En casa se suele disponer de un suministro monofásico de 230V de como máximo 10kW de potencia. En la mayoría de puntos de recarga domésticos, la potencia disponible será de 3,7kW (16A a 230V) con lo que se tardará entre 6 y 8 horas en poner a punto la batería de un coche eléctrico medio.
Si tu coche eléctrico permite la recarga a esta potencia y dispones de un punto de recarga o wallbox en tu vivienda u oficina (para lo cual deberás de tener contratada una potencia elevada, mayor a esos 7,4kW), esta modalidad de carga te permitirá recargar el coche mucho más rápido sin tener que utilizar instalaciones con suministro trifásico de gran potencia.
FUERA DE CASA
En la actualidad existe poca infraestructura de cargadores públicos, lo que dificulta mucho los desplazamientos con un coche electrificado. Y todo ello a pesar de que la mayoría de marcas, como es el caso de Peugeot, están instalando en sus vehículos complejos programas se facilitan esta tarea. La firma francesa, por ejemplo, dispone de la app ChargeMyCar de Free2Move Services, que localiza los puntos de carga disponibles y compatibles con tu vehículo, te guía hacia ellos, organiza itinerarios y hace un seguimiento de tu consumo; ya sea desde un smartphone o en la pantalla del coche. Este servicio también ofrece una tarjeta de pago única y una solución de acceso universal para recargar tu coche eléctrico en la mayor red europea de puntos de carga. La gran ventaja de los puntos de carga públicos o en electrolineras es que ofrecen capacidades de carga mucho mayores.
Carga rápida. Con potencias de entre 11kW (16A a 400V) y 22kW (32A a 400V), permite cargar la batería en algo más de una hora. Este tipo de carga se puede hacer en corriente alterna o corriente continua.
En los coches híbridos enchufables se reducen mucho todos estos tiempos de recarga ya que disponen de baterías mucho más reducidas que los eléctricos puros.
Frecuencia de carga
Teniendo en cuenta que un coche eléctrico medio ofrece una media de entre 300 y 400 kilómetros de autonomía, y que en España se recorre unos 240 kilómetros semanales de media, con una recarga a la semana sería suficiente. Con este dato se rompe el mito de tener que estar recargando el coche constantemente, a no ser que hablemos de un híbrido enchufable.En este caso sí lo deberíamos de recargar casi a diario, ya que hablamos de que en nuestro país se recorre una media diaria de 34 kilómetros y los mdoelos PHEV ofrecen unos 50 kilómetros de autonomía 100% eléctrica.
Coste de la carga
Es difícil hacer un cálculo exacto sobre los costes de recarga de un coche electrificado por la diferencia entre las tarifas eléctricas existentes, pero sí se pueden establecer algunas referencias comunes. Lo primero que hay que saber es que siempre será más económico cargar el coche en casa que en un punto público de pago.En casa, lo más recomendable si tienes un coche eléctrico es contratar una tarifa con discriminación horaria supervalle (2.0DHS). En las horas supervalle, de noche, se produce una reducción considerable del consumo y los precios son mucho más bajos.
Para hacer una estimación exacta vamos a realizar una comparación de gastos con coches concretos. Mientras que con un Peugeot un Peugeot e-2008 se gastan 2,04 euros de energía eléctrica cada 100 kilómetros, con su equivalente con motor diésel este gasto se eleva hasta los 4,84 euros/100 km.