¿Cuándo no hay que pagar el impuesto de circulación?
Los propietarios de vehículos tienen asumidos toda una serie de gastos asociados a los mismos. Las revisiones y reparaciones relacionadas con el mantenimiento del coche son los gastos más habituales de la mayoría de conductores. A este desembolso hay que añadirle el pago del impuesto de circulación de manera anual.
Aunque la mayoría de conductores están obligados a pagar esta tasa, hay una serie de vehículos que están exentos del mismo. Se trata de los vehículos oficiales, cuerpo diplomático, servicios sanitarios, transporte público con más de nueve plazas y la maquinaria agrícola.
Discapacidad igual o superior al 33%
A todos estos casos indicados anteriormente hay que añadirle el caso de las personas con movilidad reducida. Es decir, aquellas que tengan reconocida una discapacidad igual o superior al 33%.El no hacer frente al pago del impuesto de circulación conlleva una deuda municipal que se va acumulando. El proceso puede acabar en embargo, cuando la deuda supere los 500 euros.