El truco para limpiar a fondo tu coche por 1 €
Para muchos el coche es su templo, un espacio de paz y tranquilidad que debe estar impoluto a toda costa. Existen un sinfín de productos específicos para tener el vehículo como los chorros del oro, con líquidos especiales para el cuero o las piezas plásticas del salpicadero, pero su precio los hace fácilmente descartables. Más aún, cuando puedes conseguir un resultado parecido con trucos caseros de efectividad probada, os los explicamos.
Muchos de estos consejos pueden seguirse con los productos que tenemos en casa para su limpieza, ideales para resolver emergencias sin tener que invertir más dinero o perder tiempo buscando algo concreto. En ese sentido, existen mitos y trucos realmente sorprendentes, como utilizar Coca-Cola con un cepillo para frotar la goma de los neumáticos y dejarlos como nuevos. Tampoco pasa por alto el remedio casero de usar el agua de las patatas cocidas con vinagre para los cristales, la espuma de afeitar para los asientos manchados o el alcohol con vaselina líquida para la carrocería, lavándose después con muchas ganas (jabón, agua y secado).
Vinagre para ahorrar
En resumen, el ahorro tiene mucho que ver con el ingenio y la confianza en aquellos que lo han probado antes. Si limpiar el coche es un pasatiempos que te relaja no dudarás en invertir tiempo en ello, aprovechando cualquier inspiración para que su reluciente aspecto muestre parte de tu personalidad perfeccionista. Además, no está reñido con la sostenibilidad y el reciclaje, palabras de moda en el argot de la automoción a día de hoy.
Y, ¿Qué hay más ecologista que la reutilización de comida? Pues el vinagre blanco puede ser tu aliado principal en la tarea de limpieza del coche. Este vinagre de limpieza lo puedes encontrar en los supermercados por menos de 1 euro y te salvará de las situaciones más complicadas en formato pulverizado. Para ello, puedes reutilizar alguno de los botes de productos como el limpiacristales o desengrasante de casa tras extraer todo el líquido de su interior.
La disolución del milagro de la limpieza es un 50% de vinagre blanco/limpieza y un 50% de agua. El resultado lo puedes pulverizar sobre los tejidos del vehículo (asientos y moqueta), pero también en las puertas, molduras o techo para, a continuación, secarlo con un trapo limpio en cuestión de segundos. Es posible que cueste algo más en zonas muy sucias, pero con un cepillo y algo de maña conseguirás dejar tu coche como cuando lo compraste. Y sin olores tras dejar ventilar un rato.