Estos neumáticos son la mejor alternativa para tu coche este invierno

Aunque España no es un país en el que las nevadas sean tan constantes e intensas como en otros países del norte de Europa, sí que hay algunos puntos en los que la nieve causa estragos en las carreteras y se convierte en un problema para los conductores. Si vives en una zona en la que durante el invierno las nevadas son recurrentes, te explicamos la importancia que podrían tener para ti los neumáticos de invierno frente a las clásicas cadenas.

El líquido anticongelante, también conocido como líquido refrigerante , hará que la temperatura del motor de tu vehículo sea la correcta independientemente del tiempo que haga en la calle. Este líquido evita que algunas piezas se congelen o sufran más por las bajas temperaturas en los meses más fríos pero en verano hace la función contraria evitando que el motor se caliente en exceso.

Para revisar el líquido anticongelante de tu coche sólo tendrás que abrir el capó y buscar el depósito de este, que suele ser algo más grande a simple vista que el del líquido del limpiaparabrisas (y cuentan con símbolos distintos). El depósito de este líquido tiene dos marcas: mínimo y máximo. Si el líquido se encuentra entre ambas, todo estará en orden.

El líquido anticongelante debe revisarse cuando tu coche esté frío, sin el motor caliente, ya que sino el nivel de líquido no será el correcto. Eso sí, antes de cambiarlo debes vaciar por completo los restos del anterior líquido, ya que nunca deben mezclarse dos líquidos refrigerantes distintos.

Para vaciar este líquido, solo tienes que buscar el tornillo, grifo o tapón que dé acceso al circuito y abrirlo para expulsar todo el líquido. Es recomendable ubicar un recipiente en la parte inferior del circuito, por donde será expulsado el refrigerante, para ensuciar lo mínimo posible. ¡Y no te olvides de cerrarlo bien!

Los neumáticos de invierno no son demasiado comunes en España, pero en países como Alemania son obligatorios durante algunos meses del año. Este tipo de gomas ofrecen un rendimiento más efectivo a temperaturas bajas y consiguen ofrecer una mayor adherencia al asfalto. La clave está, básicamente, en su dibujo, que tiene una profundidad mayor que la de los neumáticos convencionales.

Y te preguntarás ¿por qué son mejores que las cadenas? Pues aquí tienes algunas razones: