¿Qué significan los testigos de avería del coche?
Cuando conducimos debemos centrar toda nuestra atención en la carretera, pero sin descuidar otros factores como la climatología o las condiciones del asfalto, puesto que cualquier imprevisto tiene que estar controlado en todo momento por el usuario. No obstante, hay un factor que el conductor no puede controlar: lo que sucede bajo la carrocería del coche. Por ello, nacen los testigos de avería del coche, unos pictogramas de colores situados en el panel de detrás del volante que informan de cualquier problema o avería que sufre el vehículo.
Es muy importante identificar y conocer a la perfección el significado de todos los testigos del coche, ya que nos revelan una información muy importante del vehículo con el objetivo de garantizar la máxima seguridad. Un vehículo moderno puede incluir cerca de un centenar de testigos, que no suelen ser iguales en todos los coches, puesto que no hay ninguna ley que obligue a los fabricantes a tener el mismo tipo de testigo. Por este motivo, es fundamental consultar las instrucciones del fabricante con el fin de conocer todos y cada uno de los símbolos y sus significados.
Cuando se ilumine alguno de los testigos del coche debemos mantener la calma y hacer una lectura rápida de la gravedad del problema para ponerle remedio de forma rápida y efectiva. Para detectar el nivel de peligrosidad de la avería, los testigos se iluminan de colores distintos:
Testigos de color rojo: informan de un problema grave, por lo que debemos detener el coche lo antes posible para llamar a la asistencia.
Testigos de color amarillo o ámbar: informan de un fallo en el sistema que no tiene por qué inmovilizar el vehículo. Debemos parar y llamar también a la asistencia.
Testigos que son de otros colores (verde, azul, blanco): nos ofrecen una información del vehículo, pero no se trata de una avería, por lo que no debemos detener el coche.
A continuación, explicaremos el significado de algunos de los testigos más habituales, ya que por norma general, todos los coches van a compartir una figura parecida y el mismo color, a pesar de que el tamaño, la ubicación y la forma puede cambiar de un modelo a otro.
Sistema de frenos
Este símbolo indica que el nivel del líquido de frenos está bajo o que se ha producido una avería en el sistema de frenos. Al ser un testigo de color rojo, es bastante grave, por lo que debemos detener el coche lo antes posible, aunque siempre de forma segura.
Pastillas de freno
Este símbolo de color ámbar se activa cuando alguna de las pastillas de freno se ha desgastado y se apaga de forma automática cuando se reemplazan las pastillas.
Sistema de control de gases de escape
Este testigo de color ámbar nos informa de un fallo en el control de gases del escape y de que el motor está en modo de emergencia, es decir, que notaremos una pérdida significativa en la potencia del motor y que el vehículo no superará las 2.000 revoluciones por minuto.
Presión de inflado de los neumáticos
Este símbolo en color amarillo indica que uno o varios de los neumáticos presentan una disminución de la presión de inflado. Cuando se encienda este testigo es importante identificar los neumáticos afectados y rectificar su presión para garantizar la máxima seguridad en la carretera. Si el testigo de avería está parpadeando, significa que hay algún fallo en el control de presión de los neumático, por lo que se deberá llevar el vehículo a un Servicio Oficial para que revisen el sistema.
Alternador
Si este testigo se enciende mientras estamos en marcha, significa que la batería del coche no se está cargando correctamente. Por ello, debemos proceder a detener el vehículo de forma segura y contactar con la asistencia en carretera.
Avería del motor
Este testigo nos informa de una avería o fallo en la gestión del motor, sistemas de inyección, encendido o escape. Este símbolo de color ámbar es uno de los más temidos, puesto que nos informa de un fallo en el motor pero no nos especifica cuál. Por ello, nos vemos obligados a acudir a un taller profesional con el fin de detectar la causa concreta. Los fallos más comunes están relacionados con el sensor de oxígeno, el filtro de partículas, el catalizador, las bujías, los inyectores, la tapa del combustible, el termostato, las bobinas de encendido, el caudalímetro, la válvula de control de emisiones o el sistema de evaporación de emisiones.
Presión del aceite motor
Este testigo de color rojo nos informa de la baja presión del aceite, por lo que debemos detener el coche lo antes posible y llamar a las asistencias para no causar daños más graves al motor.
Nivel de aceite del motor
Este símbolo es igual que el testigo de la presión del aceite motor pero en color amarillo, por lo que representa un nivel de peligrosidad más bajo. Este símbolo nos informa de que el nivel de aceite del motor ha bajado, por lo que no dispone de la cantidad suficiente que indica el fabricante. En este caso, debemos detener el vehículo en un lugar seguro y comprobar el nivel de aceite del motor. Si el nivel de aceite realmente está bajo, procederemos a añadir aceite y a realizar las comprobaciones necesarias para asegurarnos de que el nivel es el exigido por el fabricante.
Temperatura del líquido refrigerante
Este testigo es uno de los más importantes para el buen funcionamiento del motor. Por eso, cuando se enciende lo hace de color rojo, para informarnos de la posible gravedad del problema. Este símbolo nos puede estar avisando de un fallo en el sensor de la temperatura del líquido refrigerante, de un sobrecalentamiento del motor por la falta de refrigerante o del bajo nivel de líquido refrigerante. Debemos detener el vehículo, comprobar el nivel de líquido refrigerante y rellenarlo si fuera necesario. Si el motor está muy caliente, debemos esperar a que se enfríe antes de continuar nuestro trayecto. Si el testigo no se apaga, es recomendable detener de nuevo el vehículo y llamar al servicio de asistencia.
AdBlue
Se trata de un problema leve. Este testigo nos informa del bajo nivel de AdBlue, por lo que tendremos que parar el vehículo y proceder a llenar el líquido correspondiente. Para ello, debemos tener en cuenta las recomendaciones de cada fabricante.
Líquido limpiaparabrisas
Este testigo nos informa de que se ha agotado el líquido limpiaparabrisas. Debemos detener el vehículo, comprobar el nivel de líquido y rellenarlo si fuera necesario.
