Ferrari trabaja en un nuevo sistema de escape... ¡para eléctricos!
Ferrari tiene planeado lanzar su primer eléctrico en 2025 en lo que será, sin duda, uno de los puntos de inflexión en la industria del automóvil para la mayoría de los fans de la automoción, que relacionan un buen y profundo rugido al rendimiento de los automóviles. Siendo sinceros, pocos sonidos son más placenteros que el emitido por un V8 o un V12 acelerando al máximo.
Es por eso, y por la reiterada y manifestada voluntad de la marca de hacer coches eléctricos únicos que sean tan especiales para sus compradores como lo son ahora sus vehículos de combustión, que Ferrari estaría trabajando en un “sistema de escape” para sus coches eléctricos. No, no se trata de emitir CO2 como uno de combustión, sino de emitir un sonido que emocione a sus conductores.
Si imitará o no el rugido de sus motores o se decantará por un sonido más propio de un eléctrico no se sabe, como tampoco es conocido si llegará con su primer eléctrico. De momento, según adelanta la agencia Bloomberg, la firma italiana ha registrado una petición para obtener la patente para este sistema, que debería servir para acercar la experiencia actual de conducir un ‘Cavallino Rampante’ a los eléctricos.
Este sistema va en consonancia con las palabras dichas por Benedetto Vigna, CEO de Ferrari, hace apenas unos días, cuando manifestó que “el punto con los eléctricos es cómo extraer la mayor emoción del uso de esta tecnología, aportando algo único para sus clientes”.
El ejemplo de Dodge
Stellantis ya presentó un sistema parecido cuando desveló el eléctrico Dodge Charger Daytona SRT Concept con su sistema Fratzonic, un sistema de escape que emite un rugido de hasta 126 decibelios, un nivel parejo a las versiones Hellcat de combustión de más de 700 CV de potencia. Se desconoce el sonido que emite, pero la marca prometía algo “impactante”.
Paradójicamente, y aunque en un Charger este sistema tiene tanta coherencia como en un Ferrari, los que han podido escuchar ese rugido eléctrico se han mostrado poco emocionados. De hecho, según Tim Kuniskis, director de la marca, admitió en varios medios que las primeras opiniones fueron sobre todo negativas y que la firma seguirá trabajando para mejorarlo.
Ferrari tiene ante sí un gran reto con la electrificación y necesita trasladar ese deseo que mueve a sus compradores a decantarse por uno de sus coches por encima de la competencia al futuro mundo eléctrico. Estamos impacientes por ver qué se les ocurre.