MAN Truck & Bus presenta su hoja de ruta para electrificar el transporte pesado
La historia se repite: España va por detrás en la transición hacia la electrificación. Es un mantra que se repite constantemente y se verifica año tras año, con comparaciones dolorosas. Como la que apuntó Stephane de Creisquer, CEO de MAN Trucks & Bus Iberia, durante la presentación de su hoja de ruta para conseguir ser una compañía neutra en emisiones de CO2 para 2050: “Es bastante penoso que España esté más atrasada que Portugal y que, en un país tan relevante para la automoción como España, estemos reclamando velocidad e implicación”.
No se guardó nada en el tintero de Creisquer, como tampoco lo hicieron los directivos presentes en este encuentro: Alexander Vlaskamp, CEO de MAN Trucks & Bus, y Roman Sitte, Responsable de Europa de MAN Trucks & Bus. El objetivo de la empresa, que pertenece al grupo Volkswagen, es ambicioso, pero lo comentó Vlaskamp: “somos parte del problema de las emisiones, así que seremos parte de la solución”.
Para ello, MAN Trucks & Bus tiene como punto intermedio la reducción de un 28% de las emisiones emitidas por sus vehículos para 2030. Ese desafío lo enfoca en el rodaje de sus camiones, autobuses y furgonetas, pero también quieren rebajar en un 70% las emisiones de gases de efecto invernadero en las sedes de las empresas. Eso sí, no pueden hacerlo solos: “Es inviable sin la colaboración de la infraestructura, los clientes y los proveedores de energía verde” sentenció el CEO de MAN Trucks & Bus.
El trabajo está hecho
La elección de la movilidad eléctrica tiene sentido, tal como nos mostraron en la reunión, dado que es la tecnología más viable a día de hoy y que más aprovecha la energía utilizada para la propulsión. El hidrógeno es todavía un proyecto piloto y la infraestructura está mucho más verde que la red de cargadores pública, que ya es mucho decir.
Por ese motivo, y por la experiencia que han recogido de los proyectos urbanos, MAN Trucks & Bus se decanta por el vehículo de baterías como solución para alcanzar una huella neutral de carbono. Con una inversión de 100 millones de euros en la fábrica de Núremberg, la marca está lista para dotar a su gama de vehículos comerciales de las baterías necesarias mediante la producción de paquetes.
También han estudiado cómo cerrar el círculo de esa perfecta economía de escala sostenible y libre de carbono, reutilizando los materiales de las baterías en los centros de recuperación de Hannover y España (Barcelona). Una segunda vida para ellas es posible, y eso que Stephane de Creisquer prometió una durabilidad de 14 años o 1 millón de kilómetros, además de centrar sus esfuerzos en la posible reparación y no la sustitución como solución.
eBus
La confianza de MAN Trucks & Bus se basa en los kilómetros recorridos por su gama urbana, que aglutina a los modelos Lion’s City 10, 12 y 18 E (en función de los metros). Durante el último año, más del 60% de los concursos públicos en ciudades europeas demandaron vehículos urbanos 100% eléctricos y la firma ya ha entregado más de 1.000 unidades al Grupo Ruiz.
eTruck
El pasado mes de octubre se abrió la ronda de pedidos del Man eTruck, que ya cuenta con alrededor de 800 solicitudes. Su versatilidad permitirá utilizarlo para cualquier tipo de transporte y, antes de alcanzar el objetivo de los 1.000 kilómetros de autonomía para 2026, se comercializarán variantes de 600 a 800 kilómetros de rango.
El momento del cambio
Pero MAN Trucks & Bus entiende las dudas y miedos del cliente final, más aún hablando de vehículos que requieren de puntos de carga con un mínimo de 150 kW de potencia. Actualmente, España cuenta con 990 puntos y, tras un estudio realizado de manera conjunta con ANFAC, han elaborado una lista de los deseos que demanda 1.614 puntos para 2035 con potencias de 350 kW, 800 kW y 1.200 kW.
Como la infraestructura no depende únicamente de MAN Trucks & Bus, han desarrollado un plan para el acompañamiento del cliente. Primero analizan su situación y la viabilidad, o no, de transformar su empresa para adaptarse a la electromovilidad (asesoramiento). Durante la transición, acompañan al empresario teniendo en cuenta las rutas, los tiempos, la orografía de la zona, el tipo de mercancía, el peso, la climatología, etc.
Esa evolución también es necesaria en su propia compañía, que ha formado a la red de servicios con los requerimientos teóricos y prácticos que requiere la movilidad cero emisiones. Ese futuro será un ecosistema digital, conectado y sostenible que exige, a su vez, una sensibilización clave del entorno.