Toyota es la marca más vendida en el mundo gracias a su dominio híbrido

Toyota sigue dominando el mercado global del automóvil. En 2024, la compañía vendió 10.82 millones de vehículos, una cifra que, aunque representa una caída del 3,7% respecto al año anterior, le permitió conservar el liderazgo frente a Volkswagen. Su gran aliado en este logro ha sido el auge de los híbridos, una tecnología por lo que apostó antes y más fuerte que nadie.

El grupo, que incluye también a Daihatsu y Hino, logró mantenerse por encima del gigante alemán, que cerró el año con 9.03 millones de unidades vendidas tras una caída del 2,3%. En tiempos donde la competencia es feroz y la electrificación gana terreno, Toyota demuestra que su apuesta por los híbridos sigue dando frutos.

No es casualidad que Toyota siga en la cima. En 2024, las ventas de sus modelos híbridos (incluyendo híbridos convencionales, enchufables y mild-hybrid) crecieron un 23%, alcanzando 4.39 millones de unidades. Eso significa que el 43% de los Toyota vendidos en todo el mundo fueron híbridos, un porcentaje que en 2023 era del 34%.

Por otro lado, los vehículos eléctricos a batería (BEV) aún representan una pequeña fracción de su volumen total. A pesar de un crecimiento del 35%, solo se vendieron 139.892 unidades, apenas un 1.3% de sus entregas globales. Toyota sigue apostando más por la electrificación progresiva que por el salto directo a los BEV.

Mientras China sigue siendo un mercado complicado para muchos fabricantes, Toyota logró compensar la caída en ese país gracias a su sólido desempeño en Estados Unidos. En 2024, sus ventas en el mercado norteamericano crecieron un 4.3%, alcanzando 2.73 millones de unidades. En cambio, en China, sus matriculaciones bajaron un 6.9%, quedando en 1.78 millones.

Lexus, su división de lujo, también vivió un año positivo. Logró un nuevo récord de ventas con 851.214 unidades comercializadas, un 3,3% más que en 2023. Norteamérica sigue siendo su mayor mercado, con 355.606 unidades vendidas, lo que representa el 42% del total de la marca.

Pero el éxito de los híbridos no fue suficiente para evitar una caída en la producción global de Toyota. En 2024, la fabricación de vehículos del grupo descendió un 7,8%, cerrando el año con 10.62 millones de unidades ensambladas. Una de las principales razones fue el desplome del 29% en la producción de Daihatsu, que quedó paralizada durante meses tras descubrirse que la marca había manipulado pruebas de certificación de seguridad en Japón.