Conducir después de beber puede salirte más caro de lo que piensas
Además de poner en peligro la seguridad vial, tener que pagar una sanción administrativa y perder puntos del permiso de conducir, el conductor tendrá que asumir los gastos de los cursos de recuperación de los puntos del carné
El pasado domingo, 17 de marzo, se celebró el Día de San Patricio, una fiesta que año tras año cuenta con más arraigo en España y que todo el mundo reconoce por la abundante ingesta de alcohol que se realiza ese día. Por este motivo, es importante recordar que el alcohol es un enemigo directo a la hora de conducir, ya que no te permite estar atento a la carretera e incrementa las probabilidades de sufrir un accidente de tráfico.
Según un estudio realizado por el comparador de seguros Acierto.com, dos de cada cinco personas afirman haber cogido el coche alguna vez después de haber bebido, mientras que el 13,52% de los encuestados afirman haber conducido sobrepasando el límite legal de alcoholemia.

Por si esto fuera poco, lo más probable en estos casos es que el seguro del coche del conductor se niegue a pagar los gastos de los cursos que le tocaría hacer para recuperar los puntos del carné, aunque le hayan ofrecido en la póliza una garantía de reembolso de cursos de sensibilización y reeducación vial para la recuperación de puntos.
Cabe destacar que algunas pólizas cubren los gastos de los cursos de recuperación del carnet, pero con algunas limitaciones, entre las que haber dado positivo en un control de alcoholemia o drogas, es una de las exclusiones más frecuentes.

En definitiva, en la mayoría de los casos, las aseguradoras cubren los gastos extraordinarios que puedan derivar de la retirada del permiso de conducir. Ahora bien, si el alcohol está implicado en la pérdida de puntos o del carné, los gastos correrán a cuenta del asegurado.
Si bebes, no conduzcas
Para garantizar la máxima seguridad de sus clientes y del resto de usuarios de la carretera, algunas compañías aseguradoras cuentan con un servicio especial para lo jóvenes que beben y van en coche. Este servicio se encarga de enviar una grúa al punto en el que se encuentra el vehículo del cliente para remolcarlo hasta su casa, mientras que un taxi se encarga de llevarlo hasta su hogar de forma segura.Este servicio está disponible todas las noches, desde las 00:00 horas hasta las 07:00 horas, tanto para conductores de coche como para motoristas. Cabe destacar que el servicio se limita a un radio de 25 kilómetros del domicilio del asegurado, y depende también de la disponibilidad de grúas y taxis en el momento de la solicitud.
