Las multas veraniegas más frecuentes en España
Hay algunas prácticas veraniegas que pueden suponer multas e incluso la pérdida de puntos del carné
A punto de alcanzar el ecuador del verano, de momento la pandemia está permitiendo algunas actividades de ocio como acudir a la piscina o a la playa en busca de un refrescante chapuzón. Siguen abiertos los hoteles y el turismo local se abre paso con fuerza este año como la alternativa ideal para unas vacaciones cerca de casa adaptaras a la grave situación que vive el país.
Precisamente, es en los viajes más cortos, los que se producen para ir a la piscina, al pueblo vecino o a la playa, si está cerca, en los que se llevan a cabo una serie de infracciones, típicas del verano, que son sancionables y que pueden amargar las vacaciones a más de uno. Además, si ya en circunstancias normales la DGT intensifica la vigilancia en las carreteras por el aumento de desplazamientos, ahora el Covid-19 ha provocado que todavía haya más agentes al acecho de infracciones.
Pese a que la mayoría de multas en verano están relacionadas con el consumo de alcohol y drogas y por el exceso de velocidad, hay infracciones menores muy comunes que todos los conductores hacen y que, de ser detectadas, terminan en multa e, incluso, en retirada de puntos del carné. Estas son las infracciones veraniegas más habituales.
Conducir descalzo o con chanclas
Es algo típico coger el coche para ir a la piscina o a la playa. Por muy cerca que esté, siempre da pereza coger un par de bambas o zapatos y cambiarse cada vez que se arranque el motor. Sin embargo, según el artículo 17 del Reglamento General de Circulación, los conductores deben estar en condiciones de controlar sus vehículos, por lo que conducir descalzo, con chanclas o con tacones se considera que puede interferir en el control del coche. Esta práctica acarrea una sanción leve de 80 euros, aunque puede ascender hasta los 100, reducibles a la mitad si se paga rápido.
Ponte la camiseta
Conducir sin camiseta es peligroso. Sí, al entrar en el coche, y más si estaba aparcado al sol, hace mucho calor, pero lo adecuado es poner el aire acondicionado. Conducir sin camiseta puede ocasionar heridas por las rozaduras del cinturón o por consecuencia de la activación del airbag. Según el artículo 18 del Reglamento General de Circulación, todos los conductores están obligados a garantizar su seguridad. Así, conducir sin camiseta viola el artículo y su sanción es la misma que ir descalzo o con chanclas, 80 euros, aunque puede ascender incluso a más.
Hidrátate, pero parado
Sí, es cierto, en los anuncios de la DGT dicen que el conductor se debe refrescar con agua o un refresco durante los desplazamientos. Sin embargo, hay que hacerlo parado. Comer y beber al volante limitan los movimientos del conductor, además de obligarle a apartar la vista de la carretera. En todas las vías hay estaciones de servicio y zonas habilitadas para descansar. Es en estos lugares donde se recomienda estirar las piernas y beber o comer algo. En caso de hacerlo mientras se conduce, el conductor se expone a una multa leve de 100 euros.En todas las infracciones comentadas hasta ahora, en muchos casos será el criterio de un agente el que valore si se multará o no, ya que en el Reglamento General de Circulación no prohíbe explícitamente estas prácitcas, igual que comer o fumar, pero un agente puede valorar que ir en chanclas, sin camiseta o beber o comer al volante reduce la libertad de movimientos, la atención o la seguridad del conductor, con lo que puede ser multado.
Sacar una parte del cuerpo por la ventanilla
El mismo artículo 18 exige que todos los ocupantes del vehículo deben mantener una posición adecuada durante los trayectos. Es por eso que los conductores que saquen el brazo o el codo por la ventanilla, o dejen que algún pasajero lo haga, se enfrentan a una multa de 80 euros.
¡Quita los pies de ahí!
Una imagen muy estival, sobre todo en la televisión, es el vehículo con jóvenes que se desplazan hasta la playa. En el trayecto, el copiloto se quita las chanclas, tira para atrás el asiento y pone los pies en el salpicadero. Lo que puede parecer una tontería es, en realidad, una infracción que está castigada con 100 euros de multa para el conductor.
¿Has cogido el carné?
En los trayectos veraniegos, sobre todo los más cortos hacia una playa o piscina cercana, es probable que el conductor salga de casa con bañador, chanclas y el móvil. Todo lo demás es bulto y sobra. En este caso, además de estar infringiendo la norma que obliga a llevar un calzado adecuado, el conductor estará circulando sin carné, acción que es punible con una sanción leve de 10 euros.
¿Cuántos pasajeros lleva?
Algo típico, también, es ir a la piscina, playa o río cercano a la localidad donde se vive y, para no tener que coger dos coches, se transporta a más pasajeros de los que se puede. Llevar más personas que cinturones en el vehículo también acarrea una sanción leve penalizada con una multa de 80 euros. Según apunta el RACE, si el número de pasajeros supera en un 50% los permitidos, el conductor se expone a una multa de hasta 500 euros, a la retirada del carné tres meses y a la pérdida de cuatro puntos al ser considerada una infracción muy grave.
No tires colillas por la ventana
La última es la más grave. Conduciendo, no se pueden arrojar a la vía objetos que puedan producir incendios, accidentes u obstaculizar a otros conductores. En verano, además, la sequía incrementa las opciones de provocar un fuego si se arrojan colillas desde el vehículo. En caso de ser 'pillado' por la policía, el conducto se enfrentará a una sanción grave de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del carnet.