El McLaren W1 pulveriza los registros del F1 y el P1
El McLaren acaba de presentar el sucesor de los legendarios F1 y P1. Bautizado como W1, este superdeportivo supone la culminación de décadas de innovación para alcanzar límites desconocidos tanto en carretera como circuito. Con una potencia total de 1.275 CV, un chasis ultraligero y una aerodinámica de Fórmula 1, McLaren ha creado una auténtica obra de ingeniería.
El corazón del W1 es un motor híbrido que combina un propulsor V8 biturbo de 4.0 litros, capaz de generar 928 CV, y un módulo eléctrico de 347 CV. El resultado es una potencia combinada de 1.275 CV, la cifra más alta jamás alcanzada por un McLaren homologado para la carretera. Este sistema híbrido permite al W1 acelerar de 0 a 200 km/h en solo 5,8 segundos, y hasta 300 km/h en menos de 12,7 segundos, con una velocidad máxima limitada de 350 km/h.
Estas impresionantes cifras no solo se consiguen con mucha potencia sino también gracias a su ligereza. Una carrocería de fibra de carbono y la optimización de cada componente, hacen que el peso total del vehículo sea de solo 1.399 kg, logrando la mejor relación potencia-peso de su clase con 911 CV por tonelada. Esta impresionante ligereza, combinada con su potencia, asegura que el W1 no solo sea rápido en línea recta, sino también ágil y preciso en curva.
La aerodinámica también juega un papel fundamental en el rendimiento del W1. Desarrollado tras más de 350 horas en el túnel de viento y 5.000 puntos de prueba, este superdeportivo utiliza el principio de efecto suelo, una tecnología inspirada en los monoplazas de Fórmula 1. El sistema aerodinámico activo incluye un innovador alerón trasero denominado McLaren Active Long Tail, que se despliega hasta 300 mm en modo ‘Race’ para maximizar la carga aerodinámica, generando hasta 1.000 kg de presión sobre el coche.
El modo ‘Race’ transforma al W1 en una auténtica bestia de circuito. La altura de la carrocería se reduce en 37 mm en el eje delantero y 17 mm en el trasero, optimizando su rendimiento y estabilidad en curvas rápidas. Pero a diferencia de otros superdeportivos que comprometen la comodidad en carretera, el W1 mantiene un equilibrio único, ofreciendo una conducción suave y cómoda en modo ‘Confort’.
Un super esqueleto
El chasis del McLaren W1 es una obra maestra de ingeniería. Construido alrededor de un monocasco de fibra de carbono denominado ‘Aerocell’, no solo es ultraligero, sino que también mejora la rigidez estructural del vehículo. Esta estructura permite el uso de una suspensión de alto rendimiento inspirada en la Fórmula 1, que garantiza un comportamiento excepcional en cualquier situación.
El sistema de suspensión, denominado McLaren Race Active Chassis Control III, ofrece tres modos de conducción: Confort, Sport y Race. Este último endurece la suspensión y baja la carrocería, ofreciendo una experiencia inigualable en circuito. Además, el W1 incorpora la nueva dirección hidráulica McLaren Hydraulic Performance Steering, que proporciona una retroalimentación precisa y súper directa.
Todo orientado al conductor
El habitáculo del McLaren W1 está completamente orientado hacia el conductor. Los asientos están integrados directamente en el monocasco de fibra de carbono, proporcionando una posición de conducción baja y centrada que maximiza la sensación de control. Los pedales, el volante y los controles se ajustan para adaptarse perfectamente al conductor, creando una conexión única entre el vehículo y ‘poiloto’.
El volante, más pequeño y plano que en otros modelos de McLaren, incluye dos botones clave: ‘Boost’ para liberar toda la potencia del módulo eléctrico, y ‘Aero’ para ajustar la aerodinámica activa en tiempo real. Además, el panel de instrumentos se mueve con la columna de dirección, garantizando que la información esté siempre en el campo de visión del conductor.
Pero el interior también destaca por su ergonomía. Todos los elementos están dispuestos de manera que el conductor pueda concentrarse en la conducción sin distracciones, lo que refuerza la filosofía de McLaren de ofrecer una experiencia de manejo pura. Además, la visibilidad es una de las mejores en su clase, con pilares A ultrafinos que permiten una visión panorámica sin precedentes, tanto en carretera como en circuito.
Si quieres un W1 ya llegas tarde
Del McLaren W1 sólo se fabricarán 399 unidades, y todas ellas ya están asignadas a clientes exclusivos. El precio de partida en el Reino Unido es de aproximadamente 2 millones de libras (2,3 millones de euros aproximadamente), aunque este puede aumentar considerablemente dependiendo del nivel de personalización a través de McLaren Special Operations (MSO).
MSO ofrece a los clientes la posibilidad de personalizar prácticamente cada aspecto del coche, desde el uso de materiales exclusivos en el interior, hasta colores únicos y acabados a medida. Entre las opciones más innovadoras está la incorporación de un material llamado McLaren InnoKnit, un tejido de alto rendimiento que ofrece una flexibilidad única y un diseño adaptado a las preferencias del cliente.