Lamborghini Huracán Sterrato: 610 CV de diversión sobre tierra
Por mucho que cueste creerlo, este 2022 marcará el adiós de Lamborghini a sus motores 100% gasolina. El contexto mundial ha afectado también a los planes de desarrollo en Sant’Agata Bolognese y la inversión para completar la electrificación, de cerca de 1.500 millones de euros, supone también despedirnos de sagas icónicas como el Huracán. O mejor dicho, de la mecánica de combustión protagonizada por el V10 de 5,2 litros y 610 CV de potencia. Un motor que montará, por última vez, la atrevida e irreverente creación llamada Lamborghini Sterrato.
Los del miura saben llamar la atención, de eso no hay duda. ¿Quién si no se atrevería a despedir una era de superdeportivos con un concepto cercano al 4x4? El último Huracán sin electrificar no es otro que una edición limitada a 1.063 unidades, con tracción total, guiños estéticos y funcionales al off-road y un modo Rally para circular por pistas, o lo que se te ocurra. ¿Una locura? Sin duda y nosotros lo celebramos, además de vaticinar un posicionamiento único para este Sterrato, que arranca su producción en febrero de 2023.
¿Es un SUV?
Nada más lejos de la realidad. Este Lamborghini Sterrato mantiene la esencia sensorial y pasional de todas las obras de Sant’Agata Bolognese, sin artificios y con el único aditivo de ser capaz de circular por terrenos complicados. La valentía en el apartado de diseño les ha animado a presentarlo, oficialmente, en el Art Basel de Miami Beach, como cualquier otra obra de arte vanguardista y emocionante.
La base de este híbrido asfáltico está clara pero muy cambiada. El Huracán EVO se caracteriza por sus líneas afiladas y extremadamente aerodinámicas, algo que rompe este Sterrato con una toma de aire sobre el techo, o capó posterior bajo el que se encuentra el bloque V10 atmosférico. Este detalle no solo sorprende visualmente, también tiene un porqué en la búsqueda de una refrigeración limpia en caso de circular por pistas de tierra que podrían ensuciar la clásica toma de aire inferior.
A simple vista, este Huracán Sterrato es más contundente que cualquier otro. Sus cotas han crecido notablemente, con un ancho de vías de 30 milímetros en el eje delantero y 34 milímetros atrás. En busca de esa percepción y capacidades 4x4, este superdeportivo tiene una distancia libre al suelo 44 milímetros más alta que un EVO convencional y mayor recorrido de suspensión.
Un detalle clave amplificado visualmente por unos nuevos aletines y las protecciones de aluminio inferiores, también en las taloneras y un difusor específico para esta versión. Las luces del frontal nos permitiría adentrarnos en lugares con poca visibilidad, al tiempo que confiere una interesante firma lumínica, y las barras del techo son el guiño definitivo a una tendencia sin parangón.
Adiós a la combustión
Por mucho que nos emocione hablar de un nuevo Huracán, somos conscientes de su significado. La despedida es amarga pero inevitable: toca decir adiós a los V10 atmosféricos. El último Audi R8 V10 GT es el homenaje por parte de la firma de los cuatro aros, el Sterrato hace lo propio en la familia de miuras. En este caso, el propulsor alcanza los 610 CV de potencia y 560 Nm de par máximo sobre las 6.500 rpm.
No es el Huracán más prestacional, ni lo pretende. Junto a la caja automática de doble embrague y 7 velocidades alcanza el 0 a 100 km/h en 3,4 segundos, firmando una velocidad punta máxima de 260 km/h. Puede sonar a poco tratándose de un Lamborghini, pero tiene sus motivos. Empezando por su sistema de tracción 4x4 con diferencial autoblocante trasero y reparto de peso casi perfecto, con un 43% delante y un 57% detrás.
La clave en el apartado de la conducción la encontramos en un nuevo modo de conducción, desarrollado específicamente para el Sterrato. Se trata del modo Rally, que se une a los conocidos Strada y Sport, controlados todos por el sistema electrónico LDVI (Lamborghini Integrated Vehicle Dynamics). En este caso, y ante una situación de baja adherencia, el coche admite cierto deslizamiento sin entrometerse con los controles.
El resto del envoltorio de disfrute está conformado por unas llantas de 19 pulgadas con neumáticos específicos y función run-flat, equipo de frenos carbocerámicos de 380 milímetros delante y 356 mm detrás y un sistema de conectividad mucho más avanzado. Hablamos de la integración completa de Amazon Alexa en el Lamborghini Connect, pero también el sistema de telemetría conectado con el conductor (mide ritmo cardíaco si tienes Apple Watch) y un diario de a bordo para grabar las experiencias más puras al volante.