Renault Espace: volverá en primavera como un SUV grande

El monovolumen de la firma del rombo contará con una sexta generación, pero será en formato SUV con 5 y 7 plazas y algún tipo de electrificación.

El Renault Espace promete ser uno de los lanzamientos más relevantes para la firma del rombo en 2023. Muchos habréis pensado, ¿Un monovolumen este año? Efectivamente, el segmento de los coches más familiares no goza de su mejor momento y Renault es consciente de ello. Por ese motivo, el futuro de este nombre tiene más de crossover que nunca. Una evolución significativa que queda palpable en las imágenes filtradas por la propia marca, en las que podemos deducir su perfil alargado y de clara inspiración SUV.

Primero dieron a conocer su nombre, también entre un juego de luces y sombras, para adelantar que el Renault Espace tendrá seis generaciones. Este modelo cuenta con un largo recorrido en la historia de la automoción, y es que cinco generaciones dan para mucho. Tanto como para que los del rombo lo conviertan en un SUV de 5 y 7 plazas, una evolución necesaria para cumplir con las expectativas, gustos y tendencias del mercado europeo.

Por lo visto, el nuevo capítulo en la trayectoria del Espace se irá revelando poco a poco pero, suponemos, adoptará el lenguaje de diseño actual y la visión sostenible en sus propulsores. Por lo pronto, sabemos que mantendrá la notable superficie acristalada que tanto le identificaba anteriormente. Eso sí, con una silueta más esbelta, de hombros marcados y un alerón que propone cierto toque deportivo.

En cuanto a sus dimensiones, Renault ha revelado que es 14 centímetros más compacto que el modelo anterior. Esta reducción no supone renunciar a su habitabilidad interior, que ofrece hasta 2,48 metros de espacio para las piernas de la tercera fila.

Esto último tiene todo el sentido, empezando por la plataforma CMF-CD sobre la que se construirá y que forma parte de la Alianza. También se puede vaticinar un futuro electrificado a través de las imágenes filtradas, empezando por su denominación EspacE, con esta última letra en el color dorado que identifica a los modelos con baterías como el Renault Megane E-Tech eléctrico.

40 años de historia

La firma ha querido aprovechar este anuncio para repasar, con imágenes y datos, la historia del Renault Espace. El confort, la innovación y la sotificación son los motivos de ser de este monovolumen, referencia en habitabilidad, confort de rodadura y tecnología dentro del grupo Renault. Han pasado casi 40 años desde que la primera generación del Espace, lanzada en 1983, revolucionara el segmento de los monovolúmenes.

Fue el primer modelo en romper con los nombres alfanuméricos y Espace pareció una denominación de lo más oportuna. Tal como cuenta Sylvia Dos Santos, responsable de denominaciones de Renault: “Tiene un sonido suave, una fonética armoniosa y evoca inmediatamente comodidad, vida a bordo enriquecida y tecnología”. Sus argumentos eran la modularidad, con asientos intercambiables, giratorios y desmontables, y una gran sensación de espacio gracias a la gran superficie acristalada. Su diseño, que recordaba a los primeros TGV (trenes de alta velocidad en Francia), se mantuvo en la segunda generación.

Las cuatro primera generaciones.

El Espace II se presentó en 1991 y, ya por ese entonces, había conseguido la fama y la aceptación de la sociedad. La habitabilidad interior era su mejor baza, pero también el caché que suponía ser propietario de un monovolumen. La silueta se mantiene, pero se relaja en ciertos aspectos, con formas más redondeadas y mejores acabados en el interior. De esta segunda hornada llegaron a producirse versiones de tracción total, llamados Quadra, con motor V6 de 153 CV.

Tercera generación del Espace

El nombre de este francés nos puede recordar al espacio y esa fue la inspiración para la tercera generación de 1996. Su popularidad lo situó como el buque insignia de la firma y, por ese entonces, pocas familias se resistían a desear una de sus versiones, 5 o 7 plazas (Grand Espace). Las líneas pasaron a ser completamente curvas, más agradables y aerodinámicas que en modelos pasados. El habitáculo evolucionó radicalmente con el sonado velocímetro en LCD en el centro y la climatización a ambos lados, generando una sensación de espacio imbatible por ese entonces.

EN SITUATION

En 2002, los monovolúmenes seguían siendo dueños y señores de las aspiraciones de las familias europeas. Con la cuarta generación, el Espace siguió creciendo al tiempo que ampliaba la distancia entre ejes y, por ende, la habitabilidad interior se veía beneficiada. Seguían existiendo las versiones de 5 y 7 plazas, pero lo más recordado es el techo acristalado de la edición Initiale Paris, el acabado tope de gama.

Los SUV’s entran en el tablero y desbancan al monovolumen en un abrir y cerrar de ojos. Las firmas no tuvieron tiempo de verlo venir, o sí, pero no hicieron caso. Modelos icónicos como el Espace tenían que pelear por encontrar su nicho y eso hicieron en 2015. Para la quinta generación pensaron en pocos compradores pero fieles, con cierta inspiración crossover pero un claro enfoque al familiar de toda la vida.

Este Espace, presentado en París en 2014, será, probablemente, el último resquicio de siluetas de monovolumen en el portfolio de Renault. Una pena, visto desde el lado del confort de los siete pasajeros que gozaban de una calidad de rodadura excelente, la digitalización que se espera de un buque insignia y una conducción de lo más agradable. Veremos que nos tienen preparado para esta sexta generación, dado que prometen que conservará sus referencias pese al salto al mundo SUV.

FORMAT 16-9
Preferencias de privacidad