Primera prueba exclusiva el nuevo Renault Mégane e-Tech
Nos montamos en el nuevo modelo 100% eléctrico con el que la marca francesa quiere competir en la edición 2022 del premio Car Of The Year


El nuevo Mégane e-Tech, que se encuentra en la lista de 65 modelos candidatos este año a premio Car Of The Year 2022, llega al mercado basado en la misma plataforma de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi CMF-EV que monta el Nissan Ariya. Es un eléctrico con tracción delantera que en la unidad probada equipa un motor de 160 kW (220 CV), cuyo peso apenas supera los 145 kilos.

Este Mégane recoge la herencia del modelo que inició su andadura en 1995 (en que con una plataforma se daba vida a siete carrocerías) y, a nadie se le escapa, tendrá versión RS mucho más deportiva de la misma manera que el Ford Mustang Mach-e acaba de estrenar su version GT. El nuevo Mégane e-Tech estrena el logo de la marca y ataca de lleno al segmento C del mercado. Mide 4,21 metros de largo, 1,76 de ancho y su altura es de 1,50 metros. La distancia entre ejes es de 2,70 metros.
Diseño atractivo
El diseño es atrevido, deportivo y con una buena aceptación general. Nos ha parecido muy bien acabado. Me ha gustado particularmente la parte delantera, con un morro muy vertical. La firma lumínica es muy atractiva y las luces diurnas dibujan una silueta muy sensual.Es en el paragolpes donde Gilles Vidal (el diseñador de Renault) ha depositado buena parte del estilo deportivo. Destacan las entradas de aire laterales que sirven para refrigerar los frenos y que le dan un aspecto aún más exclusivo. Los pasos de rueda en negro le dan ese aspecto más SUV, tan de moda ahora en este tipo de neonatos eléctricos del segmento.


Una prueba completa
Durante la prueba del modelo diseñada especialmente para los jurados del Car Of The Year, pudimos completar un recorrido que incluía recorrido por ciudad, autopista, carretera comarcal y hasta alguna zona mucho más restringida. En total 117 kilómetros en los que pudimos comprobar fielmente buena parte de las prestaciones dinámicas del modelo.


Recuperación de energía
Nos ha sorprendido, en positivo, el sistema de recuperación de energía. Dispone de cuatro niveles de retención que se manejan a través de las levas situadas tras el volante. Su sistema, unido a los de ayuda a la conducción permite funcionar casi en modo autónomo gracias al control de crucero adaptativo y al sistema de reconocimiento de señales que regula la velocidad.Funcionando con alguno de los modos de retención en carreteras con curvas ha demostrado un muy buen dinamismo. Afina mucho el paso por curva. Según los ingenieros de Renault, el hecho de disponer de tracción delantera le otorga cierta ventaja respecto a la competencia (la mayoría emplea traccion trasera).
El manejo de los sistemas de infoentretenimiento no es complicado. Dispone de una gran pantalla en la consola central de 12 pulgadas con sistema OpenR Link conectado a Google Automotive Services y otra pantalla de 12.3 pulgadas en el cuadro de instrumentos. Ya puestos, echamos de menos un head-up display, aunque eso reduciría la eficiencia (y hasta tal vez la existencia) de la pantalla de instrumentación.

