Volkswagen será una marca 100% eléctrica en 2033
Volkswagen solo venderá y producirá coches eléctricos en Europa a partir del año 2033. Así lo ha confirmado su director ejecutivo, Thomas Schäfer, marcando finalmente un objetivo claro para el fin de la combustión en la marca alemana. Antes, la compañía había confirmado que dejaría de lado los vehículos tradicionales entre 2033 y 2035.
Según lo confirmado por el directivo, el proceso de electrificación de la marca, ya iniciado con los primeros lanzamientos de la familia ID. -ID.3, ID.4, ID.5, ID. Buzz-, continuará con 10 nuevos lanzamientos hasta 2026, entre ellos un pequeño coche eléctrico urbano que debería llegar al mercado por un precio inferior a los 25.000 euros. Este vehículo, el ID.1, recibirá poco después una versión SUV que se llamará ID.2. Además, el año que viene llegará la actualización de media vida del ID.3, su primer eléctrico, y, según ha confirmado Schäfer, también está desarrollando una variante crossover del mismo.
Menos costes, más rentabilidad
El despliegue eléctrico de Volkswagen no ha sido fácil hasta la fecha, con el ID.3 acumulando retrasos de producción cuando fue lanzado en 2020 y llegando al mercado con algunas funciones desactivadas por problemas de software que se han ido resolviendo durante este tiempo. De hecho, los constantes inconvenientes con el desarrollo de software fueron parte de los motivos que provocaron el cambio de consejero delegado en el Grupo Volkswagen, con Oliver Blume, director de Porsche, tomando el mando tras la salida de Herbert Diess.
A partir de ahora, como ya adelantó Neomotor, Volkswagen, marca y grupo, se centrará en reducir costes y optimizar la producción para mejorar los precios de sus eléctricos y, a la vez, ser más rentables.
En ese sentido, Volkswagen seguirá una estrategia bien definida, adjudicando una única plataforma a cada factoría para que produzca todos los modelos basados en la misma y así mejorar sus economías a escala. Siguiendo esa estrategia, Martorell debería producir los urbanos eléctricos de Cupra y Volkswagen -y parte de la producción programada del ID.2-, mientras que Volkswagen Navarra se ocupará del crossover ID.2.
Por otro lado, el Grupo Volkswagen reducirá de forma importante el número de modelos que tendrá a la venta, centrándose en los más importantes a nivel rentable y reduciendo también el número de acabados para buscar una mayor rentabilidad. El objetivo, en ese sentido, es que las marcas generalistas, incluida Seat, alcancen un beneficio operativo del 8% hasta 2025.