Este es el motivo por el que debes usar sólo dos dedos cuando frenas en moto

Si eres de los que tiene la suerte de conducir una moto a menudo, es probable que en más de una ocasión te hayan dado algún que otro consejo sobre cómo hacerlo para que sea más seguro. Sin embargo, en el día de hoy te contaremos el motivo por el que deberías utilizar dos dedos a la hora de frenar -o embragar- con tu moto.

Con el buen tiempo que solemos tener en España cada vez son más los conductores que se animan a pasarse a las dos ruedas, ya sea por tradición familiar, por entusiasmo por el mundo del motor o simplemente por probar. La comunidad motera tiene un gran sentido de pertenencia, y si formas parte de ella sabrás que en caso de estar detenido en la carretera es probable que un motero se detenga para ayudarte o que incluso existen ciertos lugares de reunión que sólo son aptos para aquel que conduce una motocicleta.

Si estás empezando en el mundo de las motos pero aún no tienes a alguien que te acompañe en tus salidas debes saber que hay aplicaciones con las que puedes contactar con otros moteros para hacer rutas, incluso dependiendo del nivel de cada uno. Sin embargo si eres de los que prefiere hacer amigos de manera tradicional siempre puedes salir a dar una vuelta por tu cuenta y parar a tomarte algo en algún bar en el que veas muchas motos aparcadas.

Sin embargo, independientemente de la experiencia que tengas conduciendo una moto, es posible que sigas cometiendo más fallos de los que te gustaría, aunque no te des cuenta. Uno de los más comunes es la posición de tus pies en las estriberas, ya que muchas personas los colocan de una manera errónea. Lo correcto es que el metatarso del pie esté colocado en la estribera, de tal manera que puedas moverlo hacia delante cuando sea necesario frenar (en el caso del derecho) o cambiar de marcha (en el caso del izquierdo).

Si hablamos de las manos, también es importante saber cómo colocarlas, ya que nos pueden ahorrar más de un disgusto. Si no lo sabías, lo mejor que puedes hacer es sujetar el embrague o el freno con sólo dos -o como mucho tres- dedos, ya que si utilizas más es posible que tu mano se escapase del manillar en caso de un frenazo o movimiento brusco. Lo mejor es usar el dedo índice y el corazón.

Es posible que al principio te cueste accionar las palancas con solo dos dedos, pero con el paso del tiempo te irás acostumbrando y comprobarás que es útil para la conducción y para tu seguridad.