Así son los primeros prototipos del Renault R5 eléctrico
Sin duda, es uno de los coches más esperados desde que Renault lo anunció en 2021 junto a su plan estratégico ‘Renaulution’. El R5 eléctrico, la reinterpretación enchufable del clásico compacto de la firma del rombo está cada vez más cerca -se espera para mediados de la década- y la compañía ya lo está probando en su forma de prototipo. El R5 se enfrenta ahora a su examen final, una tanda de test que lo llevará a luchar contra condiciones extremas para probar su fiabilidad. Así son los primeros prototipos del R5 eléctrico.
No hay imágenes oficiales todavía sobre el R5 eléctrico más allá de las del prototipo presentado en 2021, que a grandes rasgos anticipa ya cómo será estéticamente, pero sí tenemos algunos detalles técnicos que detallan sus capacidades mecánicas. Por ejemplo, el R5 eléctrico estrenará la nueva plataforma CMF-B EV de la Alianza Renault-Nissan, una arquitectura dedicada especialmente para coches eléctricos con la misión de compartir algunos de sus componentes para reducir costes.
¿Cómo lo va a hacer? En primer lugar, el disponer de una plataforma que no solo usará el R5, sino otros eléctricos de la Alianza, permite economías a escala que ya, de por sí, reducen su coste. Además, esta arquitectura deriva de la CMF-B actual, que ya usan coches como el Clio y el Captur, con lo que el 70% de sus componentes son compartidos. En ese sentido, según la misma marca, en comparación con el Zoe E-Tech, basado en una plataforma específica para el coche, el coste de fabricación de su esqueleto es un 30% menor. Renault promete un dinamismo mucho mejor del R5 frente a los vehículos de combustión CMF-B gracias a la optimización del chasis y al centro de gravedad más bajo propio de los eléctricos gracias a la posición de su batería.
Evolución del tren motriz
No innovará Renault con el R5 en el área del propulsor, sino que se valdrá de su experiencia previa con el Mégane E-Tech eléctrico y, sobre todo, con el Zoe E-Tech y utilizará la misma tecnología de motor síncrono con rotor bobinado. Según la marca, este tipo de motor eléctrico permite una mayor eficiencia respecto al motor de imanes permanentes, evita el uso de tierras raras y reduce los costes de producción a gran escala.
Como explica Renault, se ha trabajado para que el convertidor, el cargador de a bordo y el control de gestión de la energía se integren en una sola pieza y el motor en su conjunto sea más compacto, concretamente 20 kilos más ligero respecto al del Zoe E-Tech. A nivel del esquema eléctrico, tendrá una arquitectura de 400 voltios, la más habitual en el sector de momento a la espera de la apuesta por los 800 voltios. Su batería, que promete mayor capacidad que en el Zoe E-Tech pero de la que faltan detalles, será también más ligera que la del compacto eléctrico actual de la marca francesa, hasta 15 kilos en este caso.
Pruebas extremas
Con todo, los primeros nueve prototipos del R5 eléctrico ya están siendo probados por los ingenieros de Renault. Según detalla la firma francesa, los prototipos incorporan todo lo antes descrito en el artículo, pero su diseño exterior es el del Clio, por lo que cualquier filtración esconderá el aspecto final del coche. Las pruebas se están llevando a cabo en Arvidsjaur, en Suecia, y en los centros técnicos de Renault en Lardy y en Aubevoye, Francia.
En ese sentido, en Arvidsjaur, en el extremo norte de Suecia, se somete a los prototipos a temperaturas que rodean los -30 grados y a fuertes rachas de viento para su circulación en suelo helado. Esto test ponen la mecánica y el sistema eléctrico del coche a prueba para garantizar su fiabilidad. En los centros franceses, se simulan distintas situaciones de conducción para probar su desempeño. Concretamente, hay 60 kilómetros de pistas, 42 bancos de pruebas, dos túneles de viento y 18 cámaras de corrosión.