Michelin Lasarte sopla noventa velas
Que España es un polo estratégico en el mundo de la automoción no es algo nuevo. A lo largo de la geografía nacional, las fábricas de automóviles españolas se han convertido en una pieza fundamental en el engranaje mundial del automóvil. Pero no son solo los coches, los protagonistas de la historia de hoy. En Lasarte, un municipio guipuzcoano de poco más de diecinueve mil habitantes, el fabricante de Neumáticos Michelin cuenta con una fábrica que este año sopla noventa velas, y que se ha convertido en un punto clave para el fabricante galo.
En Neomotor hemos tenido la oportunidad de ver la fábrica y celebrar su noventa cumpleaños que, curiosamente, coincide con el ciento treinta y cinco de la marca. Con el paso del tiempo, Lasarte se ha convertido en el alma del mundo de la moto. En esta instalación se fabrican todos sus neumáticos radiales premium de moto, tanto para calle como para competición. La única salvedad son los neumáticos de MotoGP, fundamentalmente por la logística.
La fábrica de Lasarte de Michelin emplea a cuatrocientos noventa empleados. Trabajadores que cuentan con una gran experiencia, con una media de veinte años en la empresa. En lo que a números se refiere, no se habla de neumáticos producidos en un año, sino que el dato es que en Lasarte se producen más de doce mil toneladas de neumáticos al año. El 90% de la producción se exporta principalmente al mercado europeo y Norteamérica; aunque muchas partidas también se envían a Sudamérica y Asia. El 46,4% de la producción son neumáticos de sport touring, un 32,1% de sport e hypersport, un 9,4% de trail, un 3,9% de off-road, un 3,8% de custom, un 2,2 de competición (radial y Moto E) y un 2,2% de scooter. Otro dato significativo, es que Michelin invierte en I+D+i más de 1,2 billones de euros.
En Neomotor hemos tenido la oportunidad de visitar la fábrica y conocer, de primera mano, el proceso de fabricación de un neumático de moto. Es un proceso interesante, sobre todo por las aportaciones de los propios trabajadores para robotizar el proceso de fabricación. Pero no todo son máquinas, ya que hay secciones en las que la presencia y participación de los trabajadores es fundamental para la producción.
El proceso de fabricación se inicia en los despachos, en donde ingenieros y diseñadores imaginan los neumáticos, creando posteriormente los prototipos sobre los que se evoluciona el diseño. Con la idea clara, el siguiente paso es el de la selección de los materiales a utilizar.
De los despachos saltamos a la arena, a la fabricación. Los propios empleados ayudan al diseño y construcción, como puede ser el sistema de gestión de bobinas de hilos metálicos necesario para la fabricación de los neumáticos. Máquinas que reciben el nombre de los montes que rodean la localidad.
Todo comienza por la carcasa, que utiliza capas de tejido y compuestos de caucho. Seguimos con el alambre de acero en los bordes, cuya finalidad es la de reforzar la estructura del neumático.
La vulcanización es otro de los procesos fundamentales en la fabricación de un neumático para motor. La carcasa se mete en un molde y se le aplica calor. El proceso crea la forma final del neumático. El neumático sigue pasando por diferentes puestos, y llega a la estación en la que se aplica, con un patrón concreto, la banda de rodadura. La finalidad: la tracción y el agarre.
Una de las estaciones más importante es en la que se inspecciona y se prueba el neumático. Cada uno de los neumáticos fabricados, se somete a una inspección visual y prueba de calidad. Los operarios más expertos forman parte de este proceso. Una vez que se dan por buenos, se empaquetan, etiquetan y se preparan para su envío final.
Este 2024, Lasarte producirá, entre otros, tres innovadores modelos que cubren los segmentos más demandados por los moteros. Hablamos de los Michelin Anakee Road, Power 6 y Power GP2.