¿Qué se esconde tras la producción de un coche eléctrico como el Q6 e-tron?
Desde finales de 2023, Ingolstadt se encarga de la producción del Audi Q6 e-tron y, desde inicio de 2024, lo hace mediante un proceso cero emisiones como el de las plantas de Bruselas (2018) y Györ (2020). Esta incorporación a la línea de montaje de la sede alemana no es importante únicamente por su relevancia en el portfolio de Audi, como primer modelo basado en la plataforma PPE, también ha implicado la implantación de la primera instalación para el ensamblaje de baterías en Alemania.
Efectivamente, la transición hacia la movilidad eléctrica no solo afecta al producto o cliente final, que sufre las restricciones al tráfico rodado en algunas ciudades o la subida de impuestos derivados de las emisiones. La elección de la electrificación como estrategia para la reducción de la contaminación rodada ha exigido una gran inversión por parte de los fabricantes, encargados de desarrollar nuevas plataformas, sistemas de propulsión y fábricas para construir dichos coches cero emisiones.
De poco sirve producir un coche sostenible si durante sus primeros días de vida contamina más que uno de combustión, de modo que las plantas en Europa han sufrido una remodelación exprés durante la última década. Ejemplo de ello es Ingolstadt, encargada de ensamblar el nuevo Audi Q6 e-tron. Con este modelo, la sede alemana estrena su era de coches eléctricos y lo hace con una estrategia global que implica a las distintas fases de producción en las estructuras y procesos existentes de carrocería y montaje.
Sin ir más lejos, la nueva plataforma PPE (Plataforma Premium Eléctrica) requiere de una batería, de modo que la factoría debía incorporar una superficie para ensamblar dicho dispositivo. Con una automatización del 90% y 300 empleados para tres turnos, el área específica diseñada en Ingolstadt será capaz de ensamblar 1.000 baterías de alto voltaje al día. Primero será con el Audi Q6 e-tron, pero la idea es adquirir experiencia para producir sus propios módulos de baterías.
¿Qué es el retooling?
Reutilizar es una de las claves de la sostenibilidad y, para que la producción del Q6 e-tron fuera lo más eficiente posible, Audi ha reciclado estructuras existentes en Ingolstadt. En los 148.000 metros cuadrados de fábrica hay 1.150 robots en marcha, de los que 680 se utilizaron previamente en el taller de carrocería de otros modelos. Los AGV (vehículos de guiado automáticos) también son reutilizados de otros proyectos. Esta versatilidad supone el beneficio de poder mantener otras producciones en la misma línea de trabajo.
En este caso, los Audi A4 y A5 de combustión conviven con los eléctricos y esta flexibilidad se traslada a secciones como el conformado en caliente para las carrocerías. El objetivo es que, además de los elementos para la plataforma PPE, los equipos de producción sirvan para fabricar componentes para motores de combustión basados en esta misma plataforma.