Aprilia RS 457: deportividad para iniciados
Hace tiempo que pasar la transición del carné A2 dejó de ser aburrido. Las novedades en el segmento de las cilindradas pequeñas son constantes, con propuestas para todo tipo de gustos y pilotos. Captar a un motero en sus inicios es clave para las marcas, dado que crea fidelidad para seguir escalando en la familia en caso de querer más y más potencia. De ahí que el lanzamiento de la Aprilia RS 457 tenga todo el sentido: es la R que abre las puertas al universo de los de Noale.
Esta nueva bicilíndrica atiende a la creciente demanda de motos menos potentes, pero de atractivo superior y equipamiento a la última. Una dotación que hereda de los lanzamientos previos de la familia 660: la Aprilia RS 660, la Tuono 660 y finalmente la Tuareg. Todas ellas pensadas para cumplir con las expectativas del apasionado que inicia su camino sobre las dos ruedas, pero también para aquel que está de vuelta y sabe que más no siempre es mejor.
Los éxitos en pista, con la victoria de Aleix Espargaró en el GP de Cataluña y la segunda posición de Maverick Viñales, son la cúspide de un iceberg creado tras años de trabajo, desarrollo e innovación en las carreras. Estos conocimientos en la competición se trasladan a su gama urbana, con el consecuente reconocimiento por parte de los clientes, que han convertido a la Aprilia RS 660 en la moto deportiva más vendida de Europa.
Un primer paso
Siempre existe un primer paso en el mundo del motero y, desde ahora, puede ser la Aprilia RS 457. Los de Noale han sabido imprimir el diseño agresivo a su modelo de inicio, aplicando los mismos puntos fuertes de ligereza, dinamismo y equipamiento, empezando por el faro delantero completamente LED. La instrumentación se completa con una pantalla TFT de 5 pulgadas a color, con los mandos del manillar retroiluminados.
Pero más allá de la imagen, que claramente ataca de lleno las pasiones más vívidas de los jóvenes (y no tan jóvenes) pilotos, esta Aprilia RS 457 monta el bloque bicilíndrico en paralelo con refrigeración líquida y doble distribución por árbol de levas, con cuatro válvulas por cilindro. Entrega, como es habitual en este segmento, 35 kW de potencia (47 CV) y hereda la solución de ser el elemento portante del chasis.
La relación peso-potencia sigue siendo el fuerte de la nueva de la familia RS, con 159 kilogramos de peso en vacío (175 kg con líquidos), pero también la parte ciclo. Estamos ante una horquilla de 41 mm de diámetro y 120 mm de recorrido que ofrece ajuste en la precarga, como hace también el monoamortiguador trasero de 130 mm de recorrido que actúa sobre el basculante de acero.
El sistema de frenos asegura una parada casi de competición, con un único disco delantero radial de 320 mm con 4 pistones, y otro disco de acero de 220 mm con monopinza atrás. Las llantas de 17 pulgadas montan neumáticos de 110/70 delante y 150/60 detrás.
El sistema ABS cuenta con dos canales, por lo que tiene un doble mapa para cuando activemos el modo más deportivo. Serán tres modos de conducción, gestionados por el sistema Ride by Wire, que modifica la actuación de la potencia, el par y el control de tracción, ajustable en tres niveles y que incluso se puede desconectar. El Quickshifter será una opción.