El McLaren Artura se convierte en una obra de arte abstracto
Para los petrolheads un superdeportivo es como una obra de arte, creada de metal, fibra de carbono y explosiones en un motor que resulta ser el corazón de esa pasión. Es lógico, entonces, que surjan muchas colaboraciones entre artistas y fabricantes de automóviles, que impulsan la visión única y espiritual de sus vehículos. La última obra de arte rodante lleva la firma de Cevin Parker, un artista alemán que muestra su fusión sobre la carrocería del primer supercoche híbrido de los de Woking: el McLaren Artura.
Para los británicos se trata de una colaboración única para un superdeportivo que, como el propio artista, mira más allá. Cevin Parker es aclamado por su capacidad de adelantarse a su tiempo, siendo un autodidacta del mundo contemporáneo que acaba de exponer su obra en la IncubART de Hamburgo. Con una clientela en auge, este joven fresco y atrevido ha conseguido dotar al Artura de un aura divertida, vanguardista e incluso con un toque urbano.
Fusión de arte y tecnología
El McLaren Artura es el primer modelo híbrido enchufable de la firma, con 680 CV de potencia y tracción trasera. Han tenido que desarrollar una plataforma específica y combina un motor gasolina 3 litros V6 de 585 CV junto a un motor eléctrico de 95 CV integrado en la caja de cambios. Alcanza los 30 kilómetros de autonomía en modo eléctrico, de modo que no llega a tener la etiqueta Cero de la DGT, un aspecto que no afectará a sus compradores.
El conductor busca prestaciones y las tiene en un superdeportivo que alcanza el 0 a 100 km/h en 3 segundos y el 0 a 200 km/h en 8,3, con una velocidad punta de 330 km/h. Como el resto de los McLaren, está construido sobre un monocasco de carbono que pesa 82 kilogramos, además del aluminio usado para el subchasis.
Una base perfecta para crear un cuadro móvil que combina el “arte” y “futuro” en una perfecta integración de la tecnología de vanguardia y el diseño imponente. Ambos son aspectos que caracterizan a los implicados en esta colaboración, que ha aprovechado la silueta aerodinámica del Artura para crear un juego óptico de armonía y color. Dos pilares de la emoción que desprenden las obras de Parker, apasionado de los coches y los instantes efímeros. Como los que concede conducir un supercoche híbrido al que le sientan fenomenal las calles de Berlín, donde ha sido fotografiado antes de dirigirse a eventos como la Nit D’arte de Palma de Mallorca.
Será allí donde podremos ver, de primera mano, esta colaboración que Bastian Luehmann, Market Director Central Europe, McLaren Automotive explica del siguiente modo: “Estamos encantados de presentar esta colaboración exclusiva con Cevin Parker. El extraordinario talento de Parker y su profundo conocimiento del arte le han permitido crear un diseño realmente extraordinario que capta a la perfección el espíritu del Artura. Su uso del color -en particular la vibrante combinación de morado y amarillo- simboliza la creatividad, la individualidad, la energía y el optimismo, todo lo cual resuena con la dinámica personalidad del Artura”.