La DGT asegura que los patinetes eléctricos son como los hipopótamos: peligros que no lo parecen
Cada vez son más las personas que deciden adquirir un patinete eléctrico para moverse por la ciudad, ir al trabajo o como su medio de transporte habitual. Sin embargo, la DGT ha lanzado una nueva campaña de concienciación sobre los verdaderos peligros que tienen los VMP.
De hecho, la Dirección General de Tráfico la ha denominado “Lo más peligroso es que no parece peligroso” y con el hashtag #PorLaAceraNO, dejando claro que los conductores de patinetes eléctricos deberían tener mucha más responsabilidad.
Los patinetes eléctricos al nivel de los hipopótamos: peligros invisibles
En las redes sociales de la DGT se ha dejado claro el mensaje que quieren transmitir: por mucho que se vean inofensivos no lo son. Por esta razón, el estamento ha decido hacer la comparación con un hipopótamo, ya que este animal es de los más peligrosos de toda África.
Puede parecer grande, bonachón y lento, pero ahí donde los ves causan, de media,unas 500 muertes de humanos al año. Es más, tienen la mordida más fuerte de todos los mamíferos con 77 kilogramos de fuerza por centímetro cuadrado. Por lo tanto, es un verdadero peligro en África.
Así pues, la DGT ha buscado esa comparación, ya que los VMP parecen algo inofensivo, pero estos vehículos pueden alcanzar, depende de la marca y diseño, velocidades de hasta 70 km/h o más. A todo esto hay que sumarle que puede parecer una velocidad lenta, pero puede causar verdaderos daños físicos en caso de choque.
Con todo ello, en esta campañase han recordado las limitaciones que tienen los patinetes eléctricos y las normas que deben seguir como el resto de vehículos del parque automovilístico:
Las lesiones que puede causar un patinete eléctrico en caso de colisión
Un choque entre un patinete eléctrico y un peatón puede causar lesiones de gravedad dependiendo de la velocidad a la que circule, el ángulo de impacto, y la masa del patinete o del conductor. Las más comunes de este tipo de vehículos pueden ser:
En conclusión, una vez visto todos los daños y problemas que puede generar un patinete eléctrico, se debe conducir con responsabilidad. Los VMP no son juguetes ni tampoco inofensivos. Es importante que los usuarios de patinetes eléctricos sigan las normas de tráfico y conduzcan a velocidades prudentes en zonas peatonales para minimizar estos riesgos.