El Citroën AMI y el reto del Camino de Santiago
Todo un desafío para un vehículo de movilidad 100% eléctrico, que ofrece 75 km de autonomía y que se muestra también eficaz en entornos rurales
El Camino de Santiago se ha convertido en algo más que un desafío para los peregrinos por las distancias, la dificultad del terreno, la climatología y el cansancio acumulado a lo largo de sus etapas y distintas variantes. Citroën se ha sumado al reto en este año Xacobeo con el AMI, un vehículo eléctrico y de pequeño tamaño, que se desenvuelve con soltura en las diversas carreteras y poblaciones que encuentra.
De Roncesvalles a Santiago de Compostela, el objetivo es cubrir el trozo español del denominado 'Camino Francés': más de 764 kilómetros que unen Navarra, La Rioja, Castilla y León y, finalmente, Galicia. El Citroën Ami está dispuesto para sacar el máximo partido a su tecnología 100% eléctrica, con 75 km de autonomía y su diseño funcional para demostrar sus cualidades lejos de las grandes ciudades.
Un diseño único
El AMI no pasa desapercibido. Su diseño único asegura un alto nivel de confort. Sus amplias superficies acristaladas y su techo panorámico permiten disfrutar del paisaje en 360º dentro de un habitáculo cómodo, cerrado y perfectamente acondicionado.[gallery link="file" td_select_gallery_slide="slide" td_gallery_title_input="Citroën AMI y el Camino de Santiago" ids="116260,116261,116262,116264,116265,116263"]
La configuración de sus dos asientos y sus zonas de almacenaje situadas bajo los pies del acompañante y en la parte trasera permiten aprovechar el espacio de modo óptimo. En el apartado estético y de personalización, dispone de opciones para poder adaptarse a los gustos y la personalidad de cada cliente. Hay que recordar, por último, que el Citroën AMI, que puede ser conducido con 16 años, ofrece libertad de movimientos a partir de 7.200 euros.