Videoprueba del nuevo Citroën C4, el confort hecho compacto
Nos ponemos a los mandos del nuevo Citroën C4, del que si tuviésemos que destacar algo tras la prueba sería su confort y facilidad de uso
En la presentación del Citroën C4 2021, nuestro compañero Raúl Rodríguez ya hizo una extensa videoprueba en la que explicaba todas las novedades que introducía con respecto a su predecesor. Por ello en esta nueva prueba en vídeo del C4 nos hemos centrado en destacar aquellos aspectos que más nos han llamado la atención tras muchos días y kilómetros de uso: su inigualable confort, su funcionalidad para el día a día, y la “amabilidad” de su motor gasolina de 130 CV.
El C4 es una berlina perteneciente al segmento C, con aspecto a medio camino entre un compacto convencional y un SUV, ya que cuenta con una carrocería con una altura libre al suelo de 156 mm, y un diseño robusto típico de los todocamino, es decir, voladizos cortos, formas imponentes y llantas de gran diámetro.
En su última generación, el Citroën C4 mide 4,36 metros de longitud, 1,8 de anchura y 1,52 de altura, con una distancia entre ejes de referencia en su segmento, de 2,67 metros. Esta le permite ofrecer un buen espacio en la plazas traseras, donde existe un gran hueco las rodillas, una anchura como para que viajen sin estrecheces tres adultos, si bien para hacerlo realmente cómo lo ideal es que lo hagan sólo dos pasajeros en las plazas de los extremos.
Además, esta espaciosidad del habitáculo no roba espacio a un práctico maletero que ofrece 380 litros tantos en las versiones de combustión como en la variante eléctrica e-C4. No sólo se trata de una de las zonas de carga más generosas de su categoría, sino que además, cumpliendo con el espíritu de confort Citroën, es muy fácil de usar gracias a un umbral de carga bajo y enrasado, a una amplia boca de carga y a unos laterales rectilíneos.
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Pero el espacio no es la principal característica del habitáculo, donde realmente destaca es en la funcionalidad. Encontramos uno de los interiores más lógicos, ergonómicos y confortables de todo el segmento C generalista.
En las plazas delanteras se disfruta de unos asientos ‘made in Citroën’, es decir, extremadamente confortables. Son amplios y cuentan con capas de distintos mullidos para ser muy cómodos, pero sin dejar de recoger adecuadamente el cuerpo. Da igual cuántos kilómetros recorras al día, es muy complicado que tras el viaje sientas sensación de fatiga o te levantes entumecido.
Desde estos asientos se tiene un fácil y ergonómico acceso a todos los mandos del vehículo. Principalmente se recogen en tres zonas. Un pequeño pero completo cuadro de instrumentos frente al conductor; una pantalla de 10 pulgadas en lo alto del salpicadero donde se plasman la mayoría de funcionalidades del vehículo; y por suerte unos mandos analógicos bajo la pantalla para controlar las funciones más habituales, como son la climatización y el control del sistema de audio.
Por lo general nos centramos sólo en analizar el puesto de conducción, pero en el caso del Citroën C4 también hablaremos del lugar para el acompañante, ya que integra un sistema que nos parece tremendamente acertado. Se trata de una guantera especial que es conde un soporte de fijación para tablets, un sistema que no nos extrañaría ver pronto en otros modelos de la competencia por su gran funcionalidad.
Independientemente de en qué lugar del habitáculo te sientes, disfrutarás de una gran comodidad y una enorme cantidad de espacios portaobjetos a tu alrededor para que todo aquello que empleas y depositas diariamente en el coche, como llaves, mandos de garaje o botellas de agua, puedas dejarlos con total seguridad, ya que quedan perfectamente fijados e incluso ocultos de miradas furtivas. Uno no se da cuenta de la importancia de estas cosas hasta que se carece de ellas.
En cuanto a sistemas tecnológicos de infoentretenimiento, conectividad y seguridad, la dotación dependerá del nivel de equipamiento de cada unidad, si bien desde la más accesible ya se disfruta de mucho más de lo necesario.
MOTOR Y COMPORTAMIENTO DEL CITROËN C4 PURETECH 130
El PureTech 130 es un propulsor gasolina turboalimentado con tres cilindros y 1.2 litros de cilindrada que genera 130 CV de potencia y 230 Nm de par motor. Este torque se entrega al eje delantero a través de una caja de cambios, que puede ser manual de seis relaciones, o, en el caso de la unidad de pruebas, automática de tipo convertidor de par con 8 relaciones.
Se trata de un motor que actúa con una suavidad y silencio digno de mención, lo cual se agradece especialmente en un uso cotidiano. Sus reacciones son siempre progresivas, pero tiene el carácter suficiente como para mover con agilidad el vehículo en casi cualquier circunstancia. Además, trabaja a la perfección con el cambio automático de 8 relaciones y convertidor de par EAT8, que lo hace si cabe más agradable. Las transiciones de marchas son rápidas, suaves y casi inapreciables a ritmos medios e incluso altos. Una opción 100% recomendable para esta motorización.
Además, es un propulsor bastante eficiente. En ficha técnica marca un consumo combinado de 5,8 litros a los 100 kilómetros recorrido, y tras la prueba nuestro ordenador de a bordo mostraba unos más que destacables 6,3 l/100 km. Una cifra extraordinaria si tenemos en cuenta que gran parte de los kilómetros acumulados fueron en ciudad, y que en ningún momento nos preocupamos por realizar una conducción eficiente.
COMPORTAMIENTO ENVIDIABLE PARA EL DÍA A DÍA
Por lo que respecta al comportamiento del coche, de nuevo cabe destacar por encima de todo el confort. Si bien tanto la dirección como las suspensiones de topes hidráulicos no transmiten al conductor toda la información que nos gustaría, lo cierto es que el guiado es bastante preciso y la estabilidad más que aceptable. La carrocería apenas balancea pese a que las suspensiones absorben casi cualquier irregularidad del firme para que no se sienta en el habitáculo, y la dirección es muy suave, lo que se agradece especialmente en entornos urbanos. Es decir, que no es un coche que recomendaríamos a quien guste de la conducción deportiva, pero sí cien por cien aconsejable para quien quiera disfrutar del confort y la facilidad de uso en su día a día.
El Citroën C4 2021 nos ha sorprendido muy gratamente con esta prueba. Es un coche que te gana a medida que compartes horas y kilómetros con él, ya que al final a un vehículo para diario se le pide confort, facilidad de uso, funcionalidad y tecnología útil, exactamente aquello que aporta el compacto francés como pocos en su segmento. Si a esto además le sumas un diseño aparente, un interior que se sitúa en lo más alto de su segmento por comodidad y espaciosidad, junto con soluciones tan prácticas como el acople para la tablet, y mecánicas altamente eficientes, incluso contando con una totalmente eléctrica, se obtiene un vehículo cien por cien recomendable para un uso cotidiano.