Citroën C3 y C5 Aircross: Ideales para una escapada

Citroën saca músculo y luce su gama de SUV con el C3 y el C5 Aircross, coches ideales para una escapada, independientemente del terreno al que tengamos que hacer frente. La marca francesa responde a estos nuevos tiempos aportando confort y seguridad con unos vehículos que ya representan un 30% de las ventas de la marca en España.

El Citroën C3 Aircross, fabricado en Zaragoza, tiene como principales señas de identidad la personalización, con hasta 70 combinaciones posibles en el exterior, el confort y la tecnología, con nada menos que 12 funciones de ayuda a la conducción.

El C5 Aircross, por otro lado, supone una nueva forma de entender los SUV, abierta a las innovaciones más sostenibles con su versión Hybrid. Su extraordinaria modularidad permite configurar su interior con 81 maneras diferentes y uno de los maleteros más grandes de su segmento.

Por diseño, personalización y confort ambos destilan aire fresco, aventura y libertad. Su comportamiento al volante, atendiendo las diferentes motorizaciones – cuatro disponibles en el C3 y 5 en el C5-, es excelente, satisfaciendo las expectativas tanto en carretera rápida o en las más sinuosas de la provincia de Ávila, donde pudimos probarlos a fondo, incluyendo variados tramos de tierra.

Con todos los atributos

Vistos desde el exterior, tanto uno como el otro son SUV sin discusión. Ambos modelos ofrecen un puesto de conducción elevado (128 cm y 133 cm de altura respectivamente), con una altura libre al suelo de 17,5 cm, en el caso del C3, y de 23 cm, en su hermano mayor.

Ambos modelos pueden contar con el sistema de antideslizamiento inteligente Grip Control, que actúa sobre las ruedas motrices delanteras, asegurando la mejor adherencia en cualquier circunstancia, y permitiendo disfrutar de una aventura confortable al gestionar el deslizamiento. El Grip Control tiene cinco modos de funcionamiento (standard, arena, barro, nieve y ESP off), que adaptan la transferencia del par motor sobre el tren delantero y gestionan el sistema de frenado en función del terreno. Se le puede añadir el Hill Assist Descent, una ayuda en los descensos que mejora la seguridad en cualquier tipo de superficie.

Además de las prestaciones offroad, los SUV Citroën añaden conceptos como comodidad, conectividad, espacio, modularidad y tecnología, gracias a elementos como su suspensión de Amortiguadores Progresivos Hidráulicos, su aislamiento acústico, el amplio espacio interior, la luminosidad, las funciones de ayuda a la conducción o los materiales utilizados en su construcción.

Espacio y modularidad

Ambos modelos destacan también porque son muy espaciosos, aprovechando al máximo su capacidad en el habitáculo gracias a una modularidad. El C3 Aircross y el C5 Aircross no sólo presumen de unos maleteros muy amplios, con hasta 520 litros y 720 litros respectivamente, sino también por las posibilidades de adaptarse a cualquier situación, gracias a elementos como sus asientos traseros deslizantes y abatibles o su apertura. El C5 Aircross puede llegar a tener 81 posibilidades diferentes de configurar el maletero.

El C3 Aircross, fabricado en Zaragoza, tiene como seña de identidad la personalización, con hasta 70 combinaciones posibles en el exterior

En el apartado de seguridad, recurren a las tecnologías más avanzadas, con funciones de ayuda a la conducción que hacen más fácil la conducción, como el Active Safety Brake, el Sistema de Vigilancia de Ángulo Muerto, la alerta de cambio involuntario de carril, el Head Up Display o la cámara trasera Top RearVision. El Citroën C5 Aircross cuenta con innovaciones como el Highway Driver Assist, el Regulador de Velocidad Adaptativo o la Alerta de Riesgo de Colisión.