Primera prueba del Ford Puma 2020

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Teniendo en cuenta el gran trabajo que hizo recientemente nuestro compañero Javier Pinés en este reportaje sobre el Ford Puma 2020, en el que detalla todas sus novedades, voy a centrarme en aquello que conocimos, vimos y, sobre todo, sentimos en la primera toma de contacto dinámica que tuvimos con este SUV en su reciente presentación internacional en Málaga.

En esta cita nos facilitaron los precios definitivos para el Ford Puma 2020 en España:

Titanium 1.0 EcoBoost 125 cv	21.925 Euros
Titanium 1.0 EcoBoost MHEV 125 cv	22.275 Euros
ST-Line 1.0 EcoBoost 125 cv	23.175 Euros
Titanium 1.0 EcoBoost MHEV 155 cv	23.175 Euros
ST-LINE 1.0 EcoBoost MHEV 125 cv	23.525 Euros
ST-LINE 1.0 EcoBoost MHEV 155 cv	24.425 Euros
ST-LINE X 1.0 EcoBoost 125 cv	24.875 Euros
ST-LINE X 1.0 EcoBoost MHEV 125 cv	25.225 Euros
ST-LINE X 1.0 EcoBoost MHEV 155 cv	26.125 Euros

En junio llegará una versión diésel 1.5 EcoBlue de 120 cv y se introducirá el cambio automático de doble embrague Powershift de 7 velocidades, únicamente en la versión 1.0 EcoBoost 125 cv. Además, durante la rueda de prensa mostraron una curiosa versión ST-Line X Vignale que aúna lujo y deportividad, y quién sabe si ya tienen lista la versión ST de altas prestaciones.

Motores y acabados del Puma 2020

En la presentación tuvimos disponible unidades con el motor 1.0 EcoBoost MHEV de 125 y 155 cv asociadas a un cambio manual de seis relaciones y con una tracción 4x2, puesto que de momento no hay alternativas en estos dos últimos términos, al contrario que sucede en el Ecosport que sí tiene tracción integral. Las primeras iban asociadas al acabado Titanium, más enfocado al confort, y las de 155 cv a la versión deportiva tope de gama ST-Line X.

En la primera jornada nos decidimos por probar el 125 cv, un motor que ya habíamos testado en otros modelos de la firma estadounidense como el Focus. Pese a ser la alternativa menos potente de la gama, mueve con soltura la carrocería del SUV, de tal modo que no echamos en ningún momento en falta más potencia si nos movíamos a ritmos legales. Incluso era capaz de ofrecer un buen rendimiento en conducciones más exigentes por los excelentes puertos de montaña de la Sierra de las Nieves de Málaga, aunque sin grandes alardes.

El Ford Puma 2020 cuenta con versiones híbridas que le permiten disfrutar de la etiqueta ECO de la DGT

Si tuviésemos que ponerle a un pero a este motor sería la rumorosidad a bajas revoluciones, sobre todo cuando se aceleraba desde cero o en recuperaciones tras caer de vueltas. No resultaba incómodo pero sí nos llamó la atención que se manifestase más que en el Focus. El Ford Puma 2020, como la gran mayoría de coches actuales, disfrutan de distintos modos de conducción (Eco, Normal y Sport) que las marcas utilizan para poder bajar las emisiones contaminantes que presentan a las autoridades, y también como en la gran mayoría el Puma anda algo de fuerza cuando se selecciona el modo "Eco". Eso sí, en el modo "Sport" anda más que sobrado para disfrutar de una conducción alegre, y en el “Normal” logramos un buen equilibrio entre prestaciones y consumo.

Éste último aspecto se ve beneficiado por una hibridación ligera, que cobra protagonismo en aceleraciones desde cero para hacer más suaves y eficientes las salidas desde parado, no sólo ayudando a arrancar más rápido y suavemente el motor cuando actúa el sistema de parada y arranque, sino apoyando la aceleración para reducir los consumos y las emisiones. Con una batería de 48 voltios y motor eléctrico de 16 cv asociado por correa al de combustión, el sistema híbrido no es tan potente como para mover el coche por sí solo en modo eléctrico, pero sí es suficiente para otorgarle al Puma la ansiada etiqueta ECO de la DGT.

Al día siguiente probamos el motor de 155 cv, que le "sienta" mejor al Puma 2020, no sólo por los 30 cv de más, sino sobre todo por un par motor que se eleva de 166 a 240 Nm. Esa mayor patada permite disfrutar como toca del buen chasis que ofrece este SUV. Ya os decimos que no es el Fiesta ‑por el que admitimos que sentimos cierta debilidad y con el que comparte plataforma‑ pero sí que nos ha recordado mucho a su conducción, situándose en nuestro ranking como uno de los B-SUV con mejor comportamiento dinámico de los que hemos probado. Las principales desventajas con respecto al Fiesta son: por descontado la mayor altura de la carrocería, y una dirección poco transmisiva.
Es inevitable sentir las inercias de una carrocería elevada, si bien un excelente tarado de suspensiones las mitiga hasta tal punto que este todocamino urbano es capaz de ir más rápido en curva que la mayoría de sus rivales directos, tal y como comprobamos en las sinuosas carreteras de la Sierra de las Nieves que, haciendo honor a su nombre, contaba con tramos nevados en los que el Puma no perdió el tipo.

Quizá el complicado pavimento serviría de excusa para esa sensación de “ingravidez” que sentimos en la dirección, pero lo cierto es que tanto antes como después de la nieve, y con el asfalto completamente seco, notamos lo mismo. Se trata de una “falsa” sensación de inestabilidad, ya que el coche va bien aplomado, pero impide disfrutar al máximo las grandes posibilidades dinámicas de este pequeño SUV. Calzado en la versión ST-Line X con unas llantas de 19 pulgadas y con una suspensión algo más rígida que en el Titanium, el Puma se coge al asfalto como si realmente tuviese garras, algo inusual en vehículos de este tipo. Y lo mejor de todo es que esas mismas suspensiones que mantiene firme a la carrocería en conducciones deportivas, son capaces de filtrar las irregularidades de la carretera de tal modo que se goza siempre de un sobresaliente nivel de confort. Aunque si lo que se busca es un coche para hacer kilómetros, nosotros nos decantaríamos por el Puma Titanium.

Diseño exterior e interior del Puma 2020

Si hablamos de diseño, hemos de admitir que nada más ponernos frente al Puma nos impactó la sobreelevada situación de los faros. Lo que sí nos enamoró a primera vista fue su zaga: robusta, deportiva y bien proporcionada.

En cuanto al interior, estéticamente poco que aportar con respecto al Fiesta ya que es prácticamente un calco de este. En cambio, y gracias a la mayores dimensiones del Puma, ofrece mayor confort y funcionalidad. En las plazas traseras pueden viajar dos adultos con más espacio para las rodillas y cabeza, y, además, ofrece el mejor maletero de su segmento. Lo es no sólo por capacidad, con un sorprendente volumen máximo de 456 litros en las versiones sin hibridación y 401 en las que disfrutan de la etiqueta ECO de la DGT.

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Pero lo mejor de todo es la solución que Ford llama MegaBox y que consiste en un hueco bajo el piso del maletero con capacidad máxima de 80 litros, que permite meter objetos en posición vertical de hasta 115 cm. Además, al estar forrado en plástico y disponer de un desagüe, puedes meter objetos sucios para transportarlos sin manchar, y al llegar a casa limpiarlos de un manguerazo.

En definitiva, el Frord Puma 2020 nos ha parecido un B-SUV con todo lo necesario para convertirse en una referencia de su segmento, ya que es ideal para la ciudad por ser fácil de llevar por sus ajustadas dimensiones y cuenta además con la etiqueta ECO por su hibridación ligera, pero a la vez divertido y dinámico gracias a conservar de forma magistral todo lo bueno que le aporta el chasis del Fiesta, pero sin perder esa funcionalidad que se busca en un todocamino de espíritu familiar gracias a su buena habitabilidad y sobre todo a un maletero tan capaz como innovador.

https://neomotor.sport.es/coches/ford/focus/nuevo-ford-focus-st-2019-lobo-con-piel-de-cordero.html