Hidrógeno, la energía limpia que concede a los vehículos gran autonomía y rapidez de repostaje
Citroën, Opel y Peugeot, marcas del grupo Stellantis, tienen en circulación en Alemania y Francia tres furgonetas de hidrógeno que pueden recorrer hasta 400 kilómetros y se repostan en 3 minutos.
Como fuente de energía el hidrógeno es una alternativa real que ya da sus primeros pasos comerciales y varias marcas asiáticas lo ofrecen en sus gamas y en algunos modelos muy específicos. El grupo automovilístico Stellantis, que engloba a las marcas del grupo francés PSA y del italiano FIAT, tiene en circulación en mercados cautivos de Alemania y Francia vehículos comerciales alimentados por hidrógeno. En estos dos países existen ya hidrogeneras, 100 en el caso de Alemania y 50 en Francia, en las que repostan las flotas de varias empresas.
En concreto, en los tres países existen furgonetas de Citroën, Opel y Peugeot rodando con esta tecnología que destaca por la elevada autonomía, las emisiones cero y la rapidez de repostaje, sólo 3 minutos. Se trata de los modelos e-Jumpy Hydrogen de Citroën, Vivaro-e Hydrogen de Opel y e-Expert Hydrogen de Peugeot que pueden alcanzar los 400 kilómetros de autonomía al combinar 350 kilómetros en modo hidrogeno y otros 50 en modo eléctrico. Un vehículo de este tipo consume entre 0,8 y 0,9 kgs de hidrógeno cada 100 kilómetros.
Los tres modelos de funcionamiento por hidrógeno, que pueden transportar 960 kilógramos (sin contar el conductor), tienen una capacidad de 6,1 metros cúbicos y una capacidad de remolque de hasta 1.000 kgs, se montan en la factoría Opel situada en Russelsheim (Alemania) a un ritmo de mil unidades año en la actualidad.
Las Jumpy, Vivaro y Expert con dos longitudes de carrocería (L2 equivalente a 4,9 metros y L3 con dimensión de 5,3 metros) llegan a Alemania desde Francia como versiones eléctricas, y en un proceso casi artesanal se transforman a funcionamiento por hidrógeno.
En Russelsheim se sustituye la gran batería que va bajo el piso de la furgoneta por tres cilindros que almacenan 4,4 kilogramos de hidrógeno a una presión de 700 bares y que proporciona 45 kW suficiente para conducir largos trayecto por autopista, eso sí, con una velocidad máxima de 115 kms/h.
El complemento a esta energía son dos baterías recargables de iones de litio que van en la cabina bajo los asientos de conductor y acompañante. Al iniciar la marcha o al acelerar la batería de iones de litio de 10,5 kWh sirve de apoyo para los picos de máxima carga.
Por su parte, el sistema completo de pila de combustible, formada por varias celdas individuales con un núcleo compuesto por una membrana de polímero y un catalizador de platino, cabe bajo el capó donde se albergan también tres radiadores para refrigeración y otro más se ubica delante de la rueda delantera derecha.
El sistema híbrido permite, además, recuperar energía en fases de deceleración y con ella carga la batería a través del motor eléctrico (generador). Gracias a su conector, si es necesario, la batería puede cargarse externamente, de modo que el vehículo puede recorrer 50 km únicamente con la electricidad de la batería.
El proceso de repostaje es muy sencillo, y mediante una manguera que se conecta a una boca de llenado hermética en solo tres minutos se rellenan los depósitos, que tienen una capacidad de 4,4 kilogramos.
Estas furgonetas comerciales de hidrógeno del grupo PSA poseen tres modos de conducción: Eco, Normal y Power. Están dotadas de frenos de disco en los dos ejes. Dato curioso es que el tubo de escape, si, llevan tubo de escape, es de plástico duro. Por él se expulsa vapor de agua y el nitrógeno del aire.
A partir de 2024 se fabricarán unas diez mil unidades al año y la cadencia aumentará al extender el sistema de propulsión al segmento de los vehículos comerciales pesados, según manifestó Richard Meyer, director de Nueva Movilidad, Electrificación y Desarrollo Internacional de Stellantis, en la presentación de los modelos de Opel, Peugeot y Citroën de hidrógeno.
En España se contempla la implantación de una red de hidrogeneras con un mínimo de 100 surtidores para 2030. Actualmente solo hay seis, situadas en Madrid, Sevilla, Zaragoza, Huesca, Albacete y Puertollano aunque, de momento, no son de uso público.