Kia Sportage: un miembro más de la familia

Como antaño lo fueron los monovolúmenes, el segmento SUV (con sus múltiples nombres) es el camino a seguir cuando formas una familia. En gamas tan completas como las de Kia, existen otras opciones igual de válidas e incluso puede que el salto se produzca dentro de la misma firma.

Un cliente de un Ceed, por ejemplo, que ahora requiere de un maletero mucho más grande y prefiere tener las plazas de atrás bien a mano. El Kia Sportage estará en su radar y no es para menos, con 4,51 metros de largo (20 centímetros más), pasa a disfrutar de un espacio de carga de 590 litros y muchas otras ventajas.

La relevancia de este segmento C-SUV en España es indiscutible, con modelos tan cotizados como el Nissan Qashqai, Peugeot 3008, Seat Ateca o Hyundai Tucson, con el que comparten ciertos aspectos y éxitos. El Kia Sportage fue de los 10 coches más vendidos en nuestro país a lo largo de 2022, un hito que atribuimos a su acertada evolución estética y la confianza que se han ganado con un público que valora la fiabilidad como punto clave en la elección de su vehículo.

Y por si alguien duda de su acogida, basta recordar que estamos ante el modelo que ha sido elegido en 2022 Coche del Año en España, un premio más que merecido que trasciende a la propia calidad del coche y consolida la fuerza de la marca. Kia ha logrado penetrar en el mercado en todos los segmentos y con el Sportage dispone de su mejor arma para atacar el más competido de todos, el de los SUV compactos (segmento C).

Como todo en la vida, para que surja el amor, el Kia Sportage debe entrar por los ojos. El cambio estético respecto a la pasada generación era arriesgado, pero necesitaban un cambio. La firma coreana está lista para seguir su propio camino sin avergonzarse, mostrando un aspecto único, singular y futurista que se focaliza en su enorme parrilla.

Mantiene la inspiración del “Tiger Nose” pero con una superficie de calandra mucho mayor y las luces diurnas en forma de boomerang integradas como un marco. Los grupos ópticos se han dividido en dos bloques, las ópticas en la parte más periférica del morro y los antiniebla en el paragolpes, protegidos por dos módulos de estilo deportivo.

La silueta también evolucionó, con unas puertas marcadas y cóncavas que cedían protagonismo a la cintura del eje trasero que, a su vez, terminaba justo donde empiezan los grupos ópticos del portón.

Una firma lumínica innovadora que podría parecer una J alargada e incluso unida por el centro, donde también encontramos el nuevo logo de Kia y esas formas cóncavas que tanto caracterizan al nuevo Sportage. Las llantas empiezan en 17 pulgadas para los acabados básicos y alcanzan las 19 en los GT-Line de serie.

Si su estética convence, el resto es pan comido. La evolución estética del exterior se traslada igualmente a un interior de aspecto atractivo y minimalista, que poco tiene que envidiar al de algunos modelos premium. Los materiales y ajustes son mejores, los tactos más blandos y la tecnología empleada más abundante.

Por encima de todos los elementos del habitáculo destaca la doble pantalla curva que guarda tras un mismo cristal dos paneles de 12,3 pulgadas: uno para la instrumentación digital, y otro para todo el sistema de infoentretenimiento y control de las funciones del vehículo.

Y algo que gusta mucho es la pantalla multi modo dual. Con un solo toque cambia de control del clima a control multimedia, para tener siempre presente, y con botones físicos, ambas funciones. Detalles que proceden del Kia EV6, elegido Car Of The Year en Europa en 2022.

Otra de las bazas del Sportage es su maletero. En las versiones gasolina alcanza los 590 litros de capacidad, un dato que lo sitúa entre los mejores del segmento y que pasa a 571 litros para los bloques diésel.

Si queremos incorporar la hibridación, y por tanto las baterías, se reducirá a los 587 litros del Sportage híbrido convencional o 540 litros del híbrido enchufable, siendo el Mild Hybrid el menos capaz con 526 litros de capacidad.

Los niveles de equipamiento del Kia Sportage disponibles son: Concept, Drive, Tech y GT-Line.

Y sí, teniendo en cuenta que se trata de un modelo de amplio espectro, se puede deducir que las opciones en cuanto a propulsión son casi infinitas y se adaptan a cualquier uso que podamos dar al Sportage. Disponemos de motores de gasolina, diésel, ambos convencionales o con micro hibridación, además de una propuesta híbrida y otra híbrida enchufable. La gama del Kia Sportage dispone de motores con etiquetas C, ECO y 0 de la DGT.

La oferta arranca con el 1.6 CRDi diésel de 115 CV con cambio manual de 6 velocidades, tracción delantera y con un precio de 30.812 euros, le sigue el 1.6 T-GDi de gasolina con 150 CV de potencia, cambio manual de 6 velocidades y tracción delantera. Su precio arranca en 28.100. Estos dos motores son los que podríamos llamar ‘convencionales’.

Para ir un paso más allá, con etiqueta ECO, Kia propone ese mismo 1.6 T-GDi de gasolina con microhibridación de 48 voltios que contempla una potencia de 150 CV, tracción delantera y con un precio de 31.412 euros. También hay microhibridación para el diésel, tomando el 1.6 CRDi de base aunque con potencia de 136 CV. En este caso está disponible con tracción total o bien solo delantera y su precio parte desde 32.412 euros. Estos dos microhíbridos disponen tanto de cambio manual o bien automático de siete velocidades, al gusto del consumidor.

Completa la gama MHEV un 1.6 T-GDi de tracción total, cambio automático de siete velocidades y una potencia de 180 CV. Su precio empieza en 42.902 euros.

Pero Kia no para ahí. Propone una versión híbrida convencional (HEV) basada en al motor 1.6 T-GDi de gasolina al que le aportan una potencia de 230 CV, asociado a un cambio automático de seis velocidades en este caso, y la opción de elegir entre tracción delantera o tracción total. Su precio se inicia en 37.600 euros.

Y para poner la guinda, la estrella de la gama es el 1.6 T-GDi de gasolina con potencia de 265 CV, cambio automático de seis velocidades y tracción total. Se trata de un híbrido enchufable (PHEV) de alta solvencia y excelente relación precio-prestaciones. Dispone de un motor eléctrico de 91 CV asociado a una batería de 13,8 kWh. El precio arranca en 45.500 euros.

Las versiones que disponen de tracción total tiene tres modos de conducción en el sistema Terrain Mode, con programas de nieve (snow), barro (mud) y arena (sand), mientras que todos los tracción delantera y trasera equipan el control de descenso.

Toda esta oferta está soportada por la calidad y la garantía de la marca, que en España ofrece para híbridos enchufables y eléctricos los 10 compromisos Kia, mientras que para el resto de gama dispone de los 7 años de garantía.