Range Rover Sport: el lujo como filosofía de vida

Conquistar al cliente más exigente requiere de algo más que la precisión de la mecánica, la deportividad y la tecnología en el automóvil. La sofisticación puede adquirir tonalidades tan dispares como atrevidas, pero siempre debe ser un aspecto único y reconocible en un fabricante premium como Range Rover. Además, la conducción de sus coches se concibe como una experiencia completa y refinada que apuntalar como si fuese una filosofía de vida, para lo que se necesitan espacios como la Range Rover House Mallorca.

Este concepto itinerante se asentó este verano, del 4 de agosto al 30 de septiembre, en Puerto Portals, el complejo náutico más prestigioso de Mallorca. Se trata de un local en el que la marca acoge a “los suyos” con mimo y cuidado, reflejando el lujo, la creatividad y el refinamiento que transmiten sus modelos. Desde ahí, hemos vivido la una jornada de la 52 SUPER SERIES Sailing Week, un circuito que surgió de las cenizas de la MedCup y que, actualmente, suele constar de cinco regatas por temporada en Europa y de eventos regulares a principios de año en Estados Unidos.

El tiempo no nos acompañó especialmente durante la prueba, así que pudimos disfrutar todavía más del lujoso espacio Range Rover House. Allí nos contaron sobre el buen ambiente que se respiró durante las sesiones de música & cocktails de la mano de Xavi Reina, que formaba parte del plan de actividades ideadas para el complejo de Puerto Portals. También vimos las joyas de Isabel Guarch expuestas e incluso pudimos olfatear alguna de las fragancias de Jo Malone, encargado de una acción en la que se creaba un ramo de flores inspirado en las Highlands escocesas.

Pero si algo nos conquistó durante nuestra introducción al cuidado mundo de la firma fue el Range Rover Sport, especialmente el SV expuesto frente al espacio de Puerto Portals. Hasta allí fuimos conduciendo un P550e con 551 CV, dado que la versión actualizada de 635 CV todavía no ha llegado a nuestras tierras. Potencia arriba o abajo, este todocamino de 4,95 metros de largo por 1,05 m de ancho y 1,82 m de alto resulta una oda a la lujuria frente al volante. Empezando por su precio de 145.300 euros de partida.

A su impresionante carrocería, más cuidada y sofisticada que la generación anterior, se suma un interior digno del fabricante inglés. No pusimos a prueba sus capacidades off-road, que las tiene, pero sí disfrutamos de un viaje a todo confort y con un consumo casi insultante tratándose de semejante coche.

Con un rango superior a los 116 kilómetros de autonomía eléctrica, el Range Rover Sport Autobiography podría haber llegado hasta el puerto sin emitir un solo gramo de CO2, pero preferí comprobar como actúa la batería de 31,8 kWh junto al bloque. El resultado fue de 2,9 l/100 km en 51,7 kilómetros de recorrido.

No habría hecho lo mismo de tratarse del Range Rover Sport SV, el más prestacional de la gama con 635 CV y un precio desde 237.000 euros.

El bloque bajo el capó es un V8 con microhibridación, así que dispone del distintivo ECO pese a su aceleración de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y velocidad punta de 290 km/h. Para soportar tal deportividad en la mecánica, los ingenieros han dotado al SV de la suspensión 6D Dynamics con muelles neumáticos y amortiguadores conectados y controlados electrónicamente.

En función del modo de conducción generan una presión distinta, por lo que pueden otorgar una conducción más aplomada o confortable dependiendo de la situación. Además, tiene las ruedas traseras direccionables, nuevos brazos de suspensión, discos de freno carbocerámicos con pinzas Brembo Octyma y el diferencial trasero activo.