Trucos y dispositivos para no olvidar a tu hijo en el coche
Estos son algunos consejos, y dispositivos, que nos ayudarán a no olvidar nada en las plazas de atrás, especialmente a los niños.
O Porriño pasó a ocupar todos los titulares hace nueve días, cuando un pequeño de dos años de edad murió tras permanecer encerrado en el coche debido al olvido de su madre. Esta trágica noticia ha conmocionado al Concello, que decretó tres días de luto por el fallecimiento, y también al resto de España, pero es más habitual de lo que pensamos. Según un estudio de Estados Unidos (NoHeatStroke.org), más de 791 niños fallecieron por golpes de calor en el interior de un coche desde 1998 hasta 2018 y a este suceso se le conoce como el “síndrome del bebé olvidado”.
El acto de dejar al pequeño en el coche puede ser intencionado, o sencillamente un despiste que puede acabar en tragedia debido a las altas temperaturas del verano. Un coche al sol puede aumentar su temperatura interior un 88% en solo dos horas, por lo que unos 39 grados en el ambiente supondrán unos 70 grados en el interior del vehículo. El ajetreo del día a día, un cambio repentino en la rutina o un pico de preocupación llevó a la progenitora a pasar por alto la parada en la guardería. Las alarmas saltaron horas más tarde cuando el padre pasó a recoger a su hijo y le indicaron que no se encontraba en el centro, tal y como nos cuentan desde Faro de Vigo.
Este caso vuelve a hacer saltar las alarmas y es que, según una estadística National Highway Traffic Safety Administration, cada año “40 niños mueren por dejarlos accidentalmente, dejarlos intencionalmente o ganar acceso no supervisado a un vehículo”. Para evitar este tipo de desgracias, muchas marcas como Volvo o Hyundai han instalado sistemas de detección de seres vivos en las plazas traseras, pero también existen algunos trucos y dispositivos que nos ayudarán a no olvidar nada en los asientos de atrás.
Trucos básicos pero efectivos
El consejo más manido y habitual es el de dejar objetos personales en las plazas traseras, por lo que siempre tendrás que acceder a estas y verás a tu pequeño sentado. Si colocas el bolso, la cartera o el teléfono en el asiento del copiloto podrías llegar a realizar la acción de bajar del coche y cerrarlo sin siquiera pasar la vista por la banqueta, así que oblígate a guardar esos bultos atrás.
Seguir una rutina de estacionamiento es clave para no saltarse ningún paso. Incluso cuando no tengas nada, ni nadie, a tu cargo puedes establecer una serie de pasos que te ayuden a interiorizar mirar las plazas traseras. Bien sea la colocación de esos objetos personales atrás, mirar por el retrovisor central al aparcar o el simple gesto de controlar la banqueta antes de bajar. Todo ello en orden cronológico nos creará la costumbre ideal para no olvidarnos jamás.
También es recomendable no llevar las lunetas demasiado tintadas. De ese modo, nosotros veremos a través del cristal pero también otros usuarios de la vía que, en caso de despiste, pueden llamar al 112.
Si hay algún cambio de planes de última hora, un ajuste de la rutina importante, lo mejor es compartirla con alguien cercano. De este modo, y si nos llegamos a despistar, podemos contar con su ayuda para recordarlo, así como hacer saber a nuestros pequeños que el coche no es un espacio seguro para esconderse.
Dispositivos para no olvidar al pequeño en el coche
El primer, y más básico, dispositivo es un recordatorio en el Waze. Esta red social de circulación nos ayuda a desplazarnos, pero también podemos ajustar un aviso o recordatorio al llegar a nuestro destino. Muchos padres optan por ‘auto’ lanzarse el mensaje de: “recuerda mirar las plazas de atrás” o “no olvides nada en las plazas de atrás”. Es un pequeño audio que se repetirá todas las veces que alcances tu punto final de ruta, así también servirá como herramienta para interiorizar esa acción.
La app Kars4Kids utiliza el bluetooth del teléfono para conectarse al coche y enviar una alarma al apagar el motor. Este aviso sonoro nos recordará que vigilemos las plazas traseras y podemos ajustar el horario, estableciendo así el periodo de tiempo en el que viajamos con nuestros pequeños entre semana o durante un fin de semana de escapada.
Como sucede con algunas alarmas, los avisos pueden pasar a un segundo plano cuando estamos agobiados o preocupados. Si es tu caso, y no quieres jugártela, siempre puedes adquirir un dispositivo específico de detección. Por ejemplo, las sillas de retención infantil pueden incorporar un sistema de monitorización que detecte si el clip del cierre está bien ajustado o que registran la presencia del bebé por su peso, avisando al teléfono en caso de alejarnos del coche. Estos mecanismos han pasado a ser obligatorios en Italia a causa de los olvidos, tal como cuentan nuestros compañeros de El Periódico de Catalunya.
El Remmy Car Baby Alert es un dispositivo universal que tan solo requiere del enchufe del mechero del vehículo. Una vez conectado, instalamos el sensor de presencia bajo la sillita de los más pequeños e incluso por debajo del forro del tapizado, así tampoco olvidaremos cargas preciadas como mascotas o bultos importantes. Tiene dos funciones: Alert y Reminder (recordatorio). Un funcionamiento similar tiene el Sensor Safe de Evenflo, que incorpora una serie de sensores en las sillas de retención para monitorizar y avisar a través de una app.
Lo más sencillo, sin duda, son las almohadillas con sensores como la Sunshine Baby iRemind, pero hay más. En este caso, se conecta con una app del móvil que dispara una alerta en caso de distanciarnos más de cinco metros del vehículo e incluso puede realizar una llamada de emergencia a los contactos establecidos en tu teléfono.