Conducir un eléctrico es ahora más barato, pero no lo suficiente
Un estudio de LeasePlan concluye que tener un coche eléctrico en España es todavía alrededor de 120 euros más caro al mes que tener un diésel o un gasolina
Los coches eléctricos ya son competitivos en muchos países, al menos los de algunos segmentos en particular. Según el estudio Car Cost Index 2020, de LeasePlan, con datos de 18 países del continente, acceder al vehículo 'cero emisiones' es más asequible que nunca, pero, por norma general, todavía es más costoso que conducir un coche diésel o gasolina. El estudio define un vehículo eléctrico como competitivo si el coste de conducirlo es menos de un 5% más caro que uno de combustión equivalente.
En ese sentido, en España, conducir un vehículo eléctrico del segmento B1, el de los utilitarios, o C1, el de los compactos, cuesta de media 730 euros al mes, mientras que tener un diésel cuesta 609 euros y un gasolina 603 euros. De este modo, se concluye que en España los eléctricos de estos segmentos no son competitivos. El estudio tiene en cuenta los gastos relacionados con la posesión en propiedad de un vehículo, como el combustible, la depreciación, los impuestos, seguros y mentenimiento, para elaborar este análisis.
Por contra, en países como Portugal, donde conducir un eléctrico es apenas 35 euros más caro que tener un coche gasolina, o en el Reino Unido, donde es 17 euros más caro, los eléctricos de estos segmentos sí son competitivos. En Alemania, Italia, los Países Bajos, Noruega y Suecia, donde ya es más barato conducir un eléctrico, también lo son. En España, solo son competitivos en el segmento medio, D2, mientras que las grandes berlinas no lo son en ningún país.
No se trata solo del precio de compra
LeasePlan recuerda que al comprar un eléctrico con un coche de combustión hay que mirar más allá del precio de compra, donde los eléctricos todavía sufren una desventaja importante respecto a sus rivales. No obstante, por contra, los eléctricos gozan de menos costes de mantenimiento y el precio de recargarlos es significativamente inferior al de repostar un coche de combustión. "La buena noticia es que el coste de un coche eléctrico está bajando y estamos viendo el desarrollo de un fuerte mercado de segunda mano para los vehículos 'cero emisiones' usados de calidad", dice Tex Gunning, CEO de LeasePlanDe este modo, para LeasePlan el principal problema ya no es tanto el precio como la carencia de una infraestructura de carga que satisfaga las neceisdades de los conductores. "La mala noticia es que los gobiernos no están proporcionando la infraestructura de carga necesaria para satisfacer la demanda del mercado", lamenta Gunning.