Nissan mantiene la huelga indefinida en Barcelona
Los trabajadores mantienen el paro a una semana vista de que la matriz japonesa decida sobre el futuro de las fábricas en España.
Los representantes sindicales y la dirección de Nissan Motor Ibérica mantuvieron ayer una tensa reunión telemática con el Departament de Treball, respondiendo así a la mediación propuesta desde la Generalitat. Tras el ciberencuentro los trabajadores lamentaron que a la cita no acudieran ni el director de la parte industrial de la compañía en España, Genís Alonso, ni Gemma Nespral (responsable de recursos humanos), en lo que califican de "falta de respeto hacia la plantilla que lleva 17 días de huelga indefinida". Desde la empresa consideran que la reunión era una formalidad.
La situación de la factoría no es fácil. La multinacional automovilística debe dar a conocer el futuro industrial para Barcelona el próximo 28 de mayo, desde Japón. Por ahora nadie dice nada y de ese mutismo nace la incertidumbre. Las plantas de Nissan (Zona Franca, Montcada i Reixach y El Prat) llevan paradas desde el pasado 5 de mayo, un día después de que se reiniciara la producción de las pick-up encargadas por Mercedes en un contrato que expira a final de este mes.
El comité de empresa convocó una huelga indefinida tras conocer que la compañía solo iba a poner en marcha la línea de las pick-up durante un tiempo y que la línea de la eNV200 (la furgoneta eléctrica) todavía no iba a ponerse en funcionamiento. La planta de Montcada i Reixach, que produce paneles de carrocería, no arrancó el día 4, lo que dejó sin piezas a Zona Franca.
Los trabajadores mostraron en esa reunión que volvió a acabar sin acuerdo su "preocupación por falta de claridad de futuro industrial y de mantenimiento de empleo". Desde Nissan insistieron que la decisión se sabrá la próxima semana. "La dirección ha vuelto a la reunión sin nada nuevo y han vuelto a reiterar que ni pueden asegurar el empleo ni los volúmenes actuales", dicen los sindicatos. Por ello mantendrá la huelga indefinida. Unos 30.000 puestos de trabajo, directos e indirectos seguirán hasta entonces en el aire, pendientes de lo que diga Japón.
Apoyo de las instituciones
Lo cierto es que nunca se había visto antes una apuesta institucional y empresarial de tal magnitud para salvaguardar el interés industrial de Catalunya como está sucediendo con el posible cierre de la planta de Nissan Motor Ibérica en Barcelona. La Generalitat se ha entregado en cuerpo y alma para defender el baluarte de la Zona Franca y, ayer mismo, Pere Aragonès, vicepresidente del Govern, afirmó tras visitar la fábrica de Seat en Martorell que "Catalunya necesita que la planta de Nissan continúe y nos hemos puesto a disposición de la compañía y del comité para lo que necesiten. El Govern no tira la toalla".Aragonés reiteró la apuesta de la Generalitat: «trabajamos con el resto de administraciones para conseguir que las decisiones que se tienen que tomar en los próximos días sean positivas para Catalunya» . Todos suman. La ‘consellera’ Àngels Chacón ha mantenido contactos con la matriz japonesa en varias ocasiones, el presidente Pedro Sánchez también mostró su apoyo y, en el entorno empresarial, Foment del Treball ha creado un grupo de trabajo para un plan de apoyo a la industria del automóvil en Catalunya, con Nissan como prioridad.