Stellantis adjudica las plataformas industriales STLA Small a Vigo y Zaragoza
Las dos instalaciones fabricarán coches del segmento B y se complementará con los compactos de la italiana de Pomigliano d’Arco
Se ha hecho esperar mucho, pero la confirmación definitiva ya está aquí. Stellantis ha hecho oficial que las plantas de Vigo y de Zaragoza se encargarán de producir buena parte de la próxima gama de segmentos de B del grupo al adjudicarse la plataforma industrial STLA Small, compartiendo arquitectura con la instalación italiana de Pomigliano d’Arco, que se centrará en los compactos. En cuanto a las fechas, se espera que los primeros vehículos de la STLA Small estén en fabricación en el segundo semestre de 2027, aunque sin especificar qué fábrica lo hará primero.
El jefe de la región Europa Ampliada de Stellantis, Jean-Philippe Imparato, ha explicado los planes de la compañía que preside John Elkann para las tres plantas en el país en una mesa redonda con medios españoles en la que estaba grupo Prensa Ibérica. «Hubo rumores, pero ahora lo oficializamos», ha zanjado.
Imparato, que ha dicho no poder revelar la inversión que se realizará en cada planta, tampoco quiso decir qué o cuántos modelos se ensamblarán en Vigo y Zaragoza con esa nueva base de ingeniería, pero sí ha destacado que habrá «continuidad» en «los modelos actuales que se producen en Zaragoza, por ejemplo, dentro del segmento B, y también en Vigo».
El mandatario, uno de los hombres fuertes de Stellantis tras la dimisión del luso (forma parte del Comité Ejecutivo Interino de diez personas que precisamente busca un sustituto para este semestre), ha indicado ahora que la STLA Small será una realidad en las líneas de ensamblaje de Vigo y Zaragoza. Según la firma, un éxito que consiguen «gracias a su competitividad, saber hacer, clima social y el apoyo de las administraciones públicas».
Un aspecto muy a tener en cuenta sobre la STLA Small es que, como avanzó este medio, finalmente sí será «un plataforma nativa BEV multienergía», no limitándose únicamente a la producción de coches eléctricos, es decir, «pensada para facilitar una movilidad eficiente».
En lo que respecta a Villaverde, desde Stellantis tan solo han asegurado que «la planta de Madrid tendrá futuro» más allá del actual Citroën C4, sobre el que se llegó a rumorear una posible salida para su producción en el norte de África. «El grupo está trabajando en varios escenarios que se comunicarán a su debido tiempo», se ha limitado a comunicar la empresa.
Camino
Tras la dimisión de Carlos Tavares como CEO en diciembre, la compañía se ha movido rápido para ir confirmando proyectos en bastiones como EE UU e Italia, pero también para despejar incertidumbres en otras latitudes. En lo que respecta a España, el gran anuncio fue sin duda la gigafactoría de baterías que se construirá junto a la china CATL en Aragón por 4.100 millones de euros, pero faltaba la guinda del pastel, que era asegurar la carga de trabajo para las plantas, dos de las tres más productivas de todo el grupo (la viguesa, al frente).
Ambas factorías habían dado pasos de gigante en los últimos años para hacerse con esta plataforma, necesaria para amarrar su futuro industrial, pero todavía estaban pendientes de una ratificación final que, por ejemplo, sí tuvo ya el mes pasado la instalación cercana a la ciudad Nápoles, hogar del histórico Fiat Panda.
Las fábricas de Vigo y Figueruelas llevan moviéndose desde casi la formación misma de Stellantis (fruto de la fusión entre PSA y FCA en 2021) para intentar hacerse con una de las cuatro nuevas plataformas diseñadas por el grupo para dar el salto al vehículo eléctrico. Desde que se dieron a conocer de forma global, todas fueron presentadas y asignadas a una u otra planta en función del tipo de coche salvo la pequeña. Las instalaciones españolas estaban «destinadas» a hacerse con la STLA Small, para vehículos de los segmentos A, B y C con un objetivo de 500 kilómetros de autonomía.
Para ello, el grupo fue presentando diversos proyectos a las convocatorias del Perte VEC (Vehículo Eléctrico y Conectado) realizadas por el Gobierno de cara a proceder a la electrificación de las fábricas, alcanzando fondos para la gigafactoría de baterías, nuevos talleres de ensamblaje de baterías en las tres plantas, procesos, mayor eficiencia energética... Stellantis recibió para Zaragoza casi 300 millones de euros (también del Perte de Descarbonización) en apoyos, el grueso para la megaplanta con CATL; Vigo, por su parte, se quedó en 65 millones, de los que una parte (15,2) corresponde al proyecto presentado de forma conjunta con Villaverde.
Balaídos y Figueruelas pasaron con nota los exámenes realizados por la compañía en base a los objetivos marcados en términos de calidad, eficiencia, costes y ayudas logradas. En el caso de Vigo, además, con el visto bueno y la enhorabuena del propio Tavares en una visita realizada en diciembre de 2023, en la que ya avanzaba el buen posicionamiento de Vigo para lograr la ansiada STLA Small.
Muy importantes fueron también los convenios colectivos firmados en las dos plantas (en 2023 en Aragón y un año después en Vigo), que sin decirlo abiertamente hacían vislumbrar este escenario, ya que los acuerdos con los sindicatos recogían un plan industrial con encaje para la plataforma.
A mayores, resultaron igualmente decisivos otros apoyos logrados para aumentar la competitividad de Balaídos, en especial el desbloqueo del enganche a la muy alta tensión de la planta viguesa, que supondrá la construcción de una nueva subestación de 72 millones para aliviar los problemas de suministro y los cortes.
Producción
No sin esquivar todas las dificultades que rodean a la industria de la automoción (que apuntan a incrementarse con el reciente nombramiento de Donald Trump), las plantas españolas de Stellantis lograron trasladar su buen desempeño a las cifras finales de producción. Según confirmó también hoy la compañía, Vigo, Figueruelas y Villaverde produjeron 981.120 vehículos, lo que representa el 41,3% del total de automóviles producidos en el país.
Como ya adelantó Prensa Ibérica, Vigo se situó en los 516.050 coches y Zaragoza en 372.481, mientras que Madrid se quedó en 92.589. En lo que respecta al ensamblaje de coches 100% eléctricos, la planta gallega produjo 45.421 unidades, la aragonesa 50.855 y la madrileña 11.119.
En la actualidad la planta de Villaverde produce los modelos Citroën C4 y C4 X. La de Vigo, por su parte, se encarga de las furgonetas K9 en el Sistema 2 (Peugeot Partner, Citroën Berlingo, Opel/Vauxhall Combo, Fiat Doblò y la versión Toyota, la Proace City) y del Peugeot 2008 en el Sistema 1. Zaragoza, también en dos sistemas, produce los Opel Corsa, Peugeot 208 y el Lancia Ypsilon, en el renacer de la enseña italiana.