Stellantis invertirá hasta 338 millones para cubrir la producción de aeronaves Archer
Stellantis es la principal accionista de Archer y recibirá, como contraprestación, más acciones de la compañía según la inversión producida.
Stellantis ha acordado cubrir hasta 370 millones de dólares -338 millones de euros- en costes laborales para Archer Aviation, apoyando así la expansión en la producción de aeronaves de la startup y consolidando su apuesta por las nuevas formas de movilidad. Esta financiación es clave para que Archer pueda alcanzar su meta de fabricar 650 unidades anuales de su aeronave Midnight.
Archer, que contaba con 360 millones de dólares en efectivo a finales de junio, ha asegurado recientemente 230 millones más en capital, principalmente aportados por Stellantis y United Airlines. La producción de Midnight, diseñada para trayectos cortos y rápidos, se llevará a cabo en Covington, Georgia.
Como parte del acuerdo, Stellantis, el mayor accionista de Archer, recibirá acciones de la compañía trimestralmente en función de los costes laborales cubiertos. El consejero delegado de Stellantis, Carlos Tavares, considera que este proyecto se alinea con la meta de la empresa de ofrecer soluciones de movilidad accesibles.
El sector de aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) enfrenta desafíos de infraestructura y certificación, y necesita financiación significativa para escalar la producción. De hecho, la inversión en investigación y desarrollo y producción de prototipos no se ha traducido aún en ingresos ni beneficios y Archer ha visto cómo sus acciones se han desplomado un 35% este año, aunque este anuncio ha impulsado levemente su valor.
Además del apoyo financiero de Stellantis, Archer anunció que Future Flight Global planea adquirir hasta 116 aeronaves Midnight, por un valor de hasta 580 millones de dólares. Archer también planea lanzar una red de movilidad aérea en Los Ángeles en 2026.
Inversión pese a la reducción de beneficios
Este anuncio de Stellantis llega tras la presentación de sus resultados para el primer semestre del año. Según sus cuentas, la compañía ha sufrido una disminución del 14% en sus ingresos netos, alcanzando los 85.000 millones de euros, y una caída del 48% en el beneficio neto, que se situó en 5.600 millones de euros. Estos resultados reflejan un descenso en el rendimiento financiero, principalmente debido a menores volúmenes, a contratiempos temporales en la producción debido a la transición de su portfolio de producto y una menor cuota de mercado, especialmente en Norteamérica. La compañía espera que estos desafíos hayan alcanzado su punto máximo.
Además, la compañía sigue realizando esfuerzos para reducir los costes de producción y, en un anuncio reciente, ha confirmado que eliminará hasta 2.450 puestos de trabajo en su planta de Warren, Detroit, donde el cese de la producción del Ram 1500 Classic a finales de año provocará un exceso de trabajadores. La fábrica de Warren, que también produce el Jeep Wagoneer y el Grand Wagoneer, cuenta con 3.700 empleados.
Stellantis trabaja bajo el paraguas del plan estratégico Dare Forward 2030, presentado en 2022 tras la fusión de PSA y FCA, con el objetivo de convertirse en una compañía tecnológica de movilidad sostenible. Entre sus metas están alcanzar unos ingresos de hasta 300.000 millones de euros en ese año, más del doble que los actuales, y generar hasta 5.000 millones a partir de las sinergias entre sus marcas. La reducción de costes operativos está siendo una de las máximas para encontrar financiación para nuevas inversiones y para incrementar los márgenes de beneficios por unidad.