Visitamos la fábrica de Continental en Lousado, una de las más avanzadas y sostenibles

Innovación, sostenibilidad y excelencia en la producción. Estos son los tres principios en los que se basa Continental a la hora de producir sus neumáticos, especialmente en su planta de Lousado (Portugal), que desde julio de 1990 ha ido evolucionando y creciendo hasta establecerse como un punto de referencia en la industria de fabricación de neumáticos.

La planta de Continental en Lousado, con unas instalaciones de 389.494 metros cuadrados y un almacén externo de 409.656 metros cuadrados, cuenta con unos 3.000 empleados y una producción anual que supera los 18 millones de neumáticos. No obstante, en los últimos tres años, la compañía ha realizado grandes inversiones en la fábrica (más de 200 millones de euros) para ampliar su cartera de productos (introduciendo los neumáticos agrícolas en 2017 y los Off The Road en 2020) e impulsar todavía más su estatus como uno de los mayores empleadores de la región y el cuarto exportador de Portugal.

Continental produce en Portugal neumáticos para productos agrícolas y neumáticos para automóviles de 14 a 22 pulgadas, con tecnologías avanzadas como ContiSeal y ContiSilent. De hecho, hace cinco años, en 2019, la fábrica alcanzó su neumático ContiSeal número 15 millones, todo un hito que demuestra el espíritu pionero de la marca en tecnología de neumáticos.

Y hasta la planta de Lousado nos dirigimos para conocer de primera mano cómo se fabrican los neumáticos Continental, en un proceso en el que la sostenibilidad tiene cada vez un mayor protagonismo, ya que la fábrica recibió hace pocos meses la Certificación Internacional de Sostenibilidad y Carbono (ISCC) Plus, una certificación reconocida internacionalmente que confirma el cumplimiento por parte de Continental de las normas especiales de sostenibilidad en su planta portuguesa y da fe de la transparencia sobre la trazabilidad de las materias primas utilizadas en los procesos de producción.

Pero eso no es todo, puesto que la factoría no deja de implementar distintas soluciones en el campo de la sostenibilidad, como la instalación de paneles solares en los tejados de sus instalaciones, la reducción del consumo de agua y energía, la instalación de aislamientos que reducen las pérdidas de calor a la atmósfera, la creación de áreas de residuos, o la conversión a la iluminación LED, entre otras medidas que convierten a la fábrica de Lousado en un ejemplo a seguir por el resto de factorías del sector.

En nuestra visita a Lousado pudimos ver paso a paso cómo se fabrican todos los productos de Continental, conociendo en detalle los innovadores procesos a los que se someten los neumáticos, incluido el UltraContact NXT, el neumático de serie más sostenible del mercado.

Este innovador neumático, que se fabrica exclusivamente en la planta portuguesa, cuenta con hasta un 65% de materiales renovables, reciclados y certificados en balance de masa, por lo que combina una proporción bastante alta de materiales sostenibles con la máxima seguridad y rendimiento.

Tal como nos explicaron en la visita a la fábrica, el neumático está compuesto por un 32% de materiales renovables. Esto incluye resinas formadas por materiales residuales de las industrias del papel y la madera, así como silicato procedente de las cenizas de la cáscara de arroz. Además, como en todos los neumáticos, uno de los materiales clave del UltraContact NXT es el caucho natural, ya que garantiza las mejores propiedades de rendimiento del neumático gracias a su elevado nivel de resistencia y durabilidad.

El objetivo de Continental es que en 2030 sus neumáticos estén compuestos por más de un 40% de materiales renovables y reciclados, siendo su objetivo final que en 2050 todos los materiales empleados en la elaboración de sus neumáticos sean 100% sostenibles. El UltraContact NXT inicia el camino para cumplir estos ambiciosos objetivos de sostenibilidad que convertirán a Continental en el fabricante de neumáticos más avanzado del mercado, tal y como establece su programa estratégico Vision 2030.