Wallbox factura un 23% más, pero retrasa su rentabilidad
La firma de cargadores quería ser rentable este trimestre, pero la ralentización del mercado de coches eléctricos retrasará unos meses el break even
La compañía española de cargadores Wallbox cerró el primer trimestre del año pasado con una facturación de 43,1 millones de euros, lo que supone un incremento del 23% respecto a los primeros tres meses del año pasado. Buenas cifras que demuestran la tendencia al alza del mercado de vehículos eléctricos aunque, como los fabricantes de coches, la firma capitaneada Enric Asunción también ha notado la ralentización de este crecimiento.
Así como las marcas de coches están retrasando o cambiando sus planes eléctricos a raíz de dicha ralentización del mercado, Wallbox ha admitido que debe retrasar sus expectativas de rentabilidad. Según tenía en sus planes, la compañía quería alcanzar un margen operativo neto positivo ya el pasado trimestre, pero finalmente Asunción, su consejero delegado, ha admitido que será este segundo trimestre cuando estén “cerca” del break even -el momento en el que se alcanza la rentabilidad-, aunque tampoco ganarán dinero en este período.
Con todo, Wallbox cerró el primer trimestre con un margen bruto del 39,6%, lo que supone mejorar la cifra en 600 puntos básicos. No obstante, el resultado operativo fue de -13,4 millones. Pese a no conseguir números positivos al cierre de junio, Asunción sí ha confirmado que se quedarán muy cerca.
Vender más, gastar menos
Asunción ha explicado en la presentación de los resultados que está muy satisfecho “con los esfuerzos de optimización que hemos realizado durante el primer trimestre, los cuales nos han permitido mejorar significativamente nuestro margen bruto”. Estos esfuerzos se traducen en una reducción del 21% en los costes laborales -contando con el ERE que afectó a 96 trabajadores- y del 30% en los gastos operativos en comparación con el mismo período del año anterior.
Asimismo, aumentó sus ventas y empezó las entregas del cargador rápido Supernova de 180 kW de potencia en el mercado norteamericano, donde también ha lanzado su cargador Pulsar Pro y ha conseguido un proyecto de expansión de infraestructura de carga por valor de 26 millones de dólares.
Más allá de las expectativas de rentabilidad, Asunción admitió que este año la compañía se centrará sobre todo en “ejecutar” su plan estratégico, “que incluye el crecimiento de ventas y el compromiso con la optimización continua, que incluye la reducción de costes y la mejora del margen bruto”. Estos esfuerzos, dijo, “se traducirán en el mantenimiento de una sólida posición financiera”.