Acerbis, 50 años dando forma al mundo

Sergino nos espera en la zona de llegadas del aeropuerto de Bérgamo con una sonrisa. Ya está jubilado pero todavía echa una mano a su antiguo jefe, a Franco Acerbis, con quien empezó décadas atrás una historia que daría para un libro, o más. Porque se cumplen 50 años desde que este emprendedor italiano empezara a vender guardabarros de plástico para las motos de enduro después de un viaje a Estados Unidos, durante el cual conoció a Preston Petty, uno de los primeros fabricantes de plásticos especializados en motos todoterreno, con quien firmó un acuerdo de distribución. Ese primer paso fue el reflejo de su intuición y saber ver la ‘oportunitá’ (oportunidad).

“Los guardabarros eran metálicos y se rompían. Con el plástico logramos mayor resistencia y reducir el peso”, recuerda Franco en la sede de la compañía. Comenzó a fabricar accesorios de fibra de vidrio, como guardabarros y carcasas de filtros de aire, prestando atención tanto al diseño como a la técnica, para sustituir a los componentes originales. Pronto se fijaron en él los fabricantes de motos, que empezaron a confiar a Acerbis el desarrollo de algunos de sus componentes.

La producción de accesorios necesitaba una marca y así creó su propia firma comercial, Acerbis Plastica Italia (1975): se trataba de reinventar productos ya presentes en las motos, mejorándolos tanto en términos funcionales como de diseño. Hablamos en primer lugar de los depósitos, los faros cuadrados con máscara fijados a la horquilla (Elba), productos de culto buscados aún hoy por los aficionados de todo el mundo. Precisamente el modelo Elba tiene su historia: “Recuerdo ver el Audi Quattro de rallies de la piloto Michele Mouton con sus faros cuadrados cuando todos los coches los llevaban redondos, como las motos. Y diseñamos la Elba. Todo el mundo me dijo ‘estás loco, un frío cuadro en lugar de redondo...”. Y actualmente la Acerbis Elba es un auténtico objeto de culto.

Historias de Franco Acerbis hay mil. Como fue por primera vez a una feria en EE.UU a principios de los años 70 con lo puesto o cuando fue a una feria en Alemania con la misma tarifa de precios que en Italia y al pagar por una cerveza el tripe que en su país se dio cuenta que se había equivocado con los precios para Alemania y los rectificó esa misma noche en el hotel antes de empezar la feria en cuestión.

Con el paso de los años, Acerbis ha ido creciendo y diversificando su negocio. En 1983 se fundó Acerbis USA en el sur de California, tierra de referencia para las carreras off-road: la primera filial americana de la empresa. Hoy la producción se reparte entre las plantas italiana y estadounidense y la de Moravany (República Checa), inaugurada en 2007 gracias a su posición estratégica para la producción y distribución de material OEM a fabricantes europeos. En 2008 se inauguró la planta del Reino Unido en Milton Keynes.

Actualmente, Acerbis cuenta con 450 empleados y produce mucho más que “simples” componentes o accesorios para moto. El director general es Guido Acerbis, hijo del fundador Franco. A lo largo de los años ha añadido todos los artículos que corresponden a la ropa técnica para motoristas, así como protectores, cascos y botas.

Y eso no es todo. Desde hace 20 años, la gama se ha ampliado con material técnico para deportistas de distintas disciplinas, como fútbol, baloncesto, voleibol, rugby y muchas otras. Se trata, además, de un sector en constante evolución, como demuestran las nuevas incorporaciones: una línea de ropa y equipamiento para pádel y una línea dedicada íntegramente al MTB. Uno de los proyectos más innovadores en la actualidad es el puntal de nailon para bicicletas eléctricas. Un proceso de sustitución del metal, exactamente como empezó todo hace 50 años.

Como parte de las celebraciones de este 50 aniversario, Acerbis se ha propuesto entrar en el Libro Guinness de los Récords. ¿Cómo? Utilizando la tecnología rotacional de Acerbis para construir un depósito sobredimensionado para equipar a una Honda Monkey 125 que permitirá cubrir la distancia desde Albino (Italia) hasta Cabo Norte (Noruega) con un solo depósito, obteniendo así un título de GUINNESS WORLD RECORDS: la mayor distancia recorrida por una moto de combustión interna sin repostar. Y para lograr este hito cuenta con colaboradores de lujo como Garmin, Honda RedMoto, Repsol y SKF.

Todo empezó en 2021 con el estudio de viabilidad, comprobando cómo distribuir los volúmenes en la moto, garantizando al mismo tiempo su seguridad y facilidad de conducción. Siguió la construcción de un prototipo de depósito en fibra de vidrio para las primeras pruebas de validación dinámica del vehículo y de consumo de combustible mediante una Prueba de Resistencia.

En septiembre de 2022, comienza la construcción del molde rotacional, moldeado por CNC a partir de bloques de aluminio, y en enero de 2023, se modela el mayor depósito de motocicleta jamás producido en serie, con una capacidad de 108 litros. El pasado 10 de junio, la moto con el depósito sobredimensionado partió en dirección a Cabo Norte, siguiendo una emocionante ruta especialmente diseñada para ella. Una vez allí, el viaje no terminará, sino que continuará hasta la última gota de gasolina. Serán 4.358 km hasta Cabo Norte pasando por Brennero, Austria, Alemania, Dinamarca, Suecia, Finlandia y Noruega que cubrirán tres conductores, entre ellos la motoviajera y escritora Alicia Sornosa; toda una aventura para celebrar el 50 cumpleaños de una marca que lleva el apellido de un visionario: Acerbis.