Honda CBR1000 RR-R, lista para competir
La firma japonesa rompe con todo con este modelo ultradeportivo con 217 CV de potencia y tecnología de MotoGP para luchar por el mundial de superbikes
[gallery link="file" td_select_gallery_slide="slide" ids="47421,47422,47420,47419"]
Hasta ahora, la Honda CBR1000 RR Fireblade era la superbike más racional del mercado. La firma japonesa siempre había abogado por una moto ‘amable con el usuario’ y utilizable. No en vano en Gran Bretaña se utiliza como ‘commuter’, es decir, para todo uso desde ir a trabajar cada día a rodar en un circuito. No obstante, las virtudes de una moto así eran todo un lastre en el mundo de la competición. Finalmente Honda ha querido dar un vuelco a la situación exprimiendo su tecnología para crear esta nueva CBR1000 RR-R y poder plantar cara a sus rivales en igualdad de condiciones.
La Fireblade, nombre con el que se conoce a este modelo, es totalmente nueva y adopta parte de la tecnología de la RC 213V-S, la moto de calle derivada del modelo de MotoGP, como el anclaje del amortiguador trasero en la parte superior del bloque motor, como en MotoGP. Sin embargo, el cambio más sustancial llega en el motor para suplir las carencias de su antecesora. La CBR1000 RR-R entrega ahora la friolera de 217 CV de potencia que se controlan gracias a una completa electrónica con control de tracción, modos de conducción, freno motor y ‘antiwheelie’ (evita que la rueda delantera se levante al acelerar).
Como no podía ser de otra manera el chasis es de nuevo cuño y la suspensión llega firmada por el especialista japonés Showa y los frenos por Nissin con unos discos de 330 milímetros. Aunque más llamativos resultan los alerones laterales, también de MotoGP, para mejorar la aerodinámica y la estabilidad del tren delantero.
Honda también pone en liza la versión SP, más equipada con suspensiones electrónicas de la marca especialista Öhlins, frenos Brembo y neumáticos Pirelli Diablo Supercorsa SC. Tanto delicatesen hace que el precio pase de los 24.500 euros de la CBR1000 RR-R a los 29.000 euros de la SP, la nueva ‘arma’ para que Álvaro Bautista luche por el título de campeón del mundo del WorldSBK. En cuanto a colores están disponibles en negro mate o rojo Grand Prix (tricolor) aunque se diferencian rápidamente por la barras doradas de la horquilla Öhlins de la Fireblade SP.