Marc y Álex Márquez ya pueden llevar motos grandes por la calle
Los hermanos Márquez vuelven a la autoescuela para sacarse el carnet A de la mano de Motoescuela
Después de años pilotando auténticas bestias de dos ruedas en los circuitos más exigentes del mundo, Marc y Álex Márquez han decidido enfrentarse a un reto... muy diferente. No hablamos de un nuevo campeonato ni de una vuelta imposible en Jerez. Esta vez, el desafío tenía forma de tráfico, normas de circulación y maniobras entre conos: ¡sacarse el carnet A de moto! Porque para llevar una moto en circuito no hace falta el carnet pero en vías públicas sí.

Sí, sí, aunque cueste creerlo, los hermanos Márquez —campeones del mundo, ídolos de masas y domadores de motos de 350 caballos— hasta hace nada solo podían conducir motos de 48 CV por la calle. Legalmente, si querían ir a por el pan en moto, tenía que ser con algo más cerca de un escúter que a una MotoGP. Ironías de la vida.
Pero eso ya es historia. Ambos han aprobado el carnet A (el de “moto grande de verdad”) y lo han hecho con estilo: en Motoescuela, el lugar al que acuden entre otros deportistas conocidos que quieren aprender bien y sin dramas. Porque cuando llevas toda la vida derrapando a 300 km/h, no te la vas a jugar con cualquier profesor, ¿no?

El proceso fue rápido y sin exámenes (privilegios de la experiencia y del carnet A2 anterior): 9 horitas entre teoría, circuito cerrado y algo de carretera abierta. Lo justo para demostrar que no solo saben meter una moto en la curva 5, en Sito Pons del Circuito de Jerez Ángel Nieto, sino también hacer un cambio de sentido sin que les multe la Guardia Civil.
Desde Motoescuela no podían estar más orgullosos de sumar a dos alumnos tan ilustres. Y los Márquez, encantados de poder llevar cualquier moto también fuera del paddock. Ahora ya podrán disfrutar de la conducción de una Ducati Multistrada V4, por ejemplo, por carreteras abiertas o ir a comprar el pan con una Ducati Diavel.
Por ahora, que nadie se asuste si ve a Marc o Álex esperando en un semáforo con una Monster. Ya tienen el carnet. Y si hace falta enseñar a alguien cómo se toma una rotonda... bueno, mejor dejarles pasar.