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Yamaha MT-07 vs Honda CB650R: difícil elección

Comparamos dos de las naked más exitosas del mercado, limitables para el A2.

Todavía recuerdo las primeras curvas con una moto de marchas. Se trataba de una Honda CB500 del 97, un “hierro” que me ayudó a aprender el ABC de la conducción sobre dos ruedas. Por suerte, los recién llegados al segmento A2 y A de hoy en día lo tienen más fácil. La electrónica e ingeniería han dado como resultado nakeds ágiles, ligeras y de lo más atractivas para un público joven, o no tan joven. Hablo de modelos como la Honda CB650R (prueba individual) y la Yamaha MT-07 (prueba individual), dos superventas para sus firmas que compiten por el mismo comprador con dos conceptos completamente opuestos. Si estás pensando en dar el salto a la media cilindrada, y están en tu lista, este comparativo te ayudará a decidir cuál de ellas ocupará su lugar en tu corazón.

Probamos la Honda CB650R y Yamaha MT-07 en tramos del RallyRACC / Foto: Club RACC.
Antes de pasar a desvelar sus pros y contras, es importante situarlas en el mercado actual. Los scooters han barrido a las motocicletas de un modo escandaloso ( más vendidas de mayo 2022), consiguiendo gran parte de las posiciones en un top 20 de ventas. Sin embargo, todavía hay esperanza para aquellos que amamos las dos ruedas, en un sentido pasional y de divertimento. La Kawasaki Z900 es la reina en ese aspecto, con 2.684 unidades matriculadas en 2021 y un top 10 entre tanto modelo urbanita. Las siguientes son las que hoy nos ocupan, con 1.943 unidades para la alada y 1.778 unidades vendidas de la MT-07.

Iguales pero muy distintas

Ante la decisión de compra, de una naked de media cilindrada, siempre existen atributos que marcarán el inicio de la búsqueda. El precio, sin lugar a dudas, es el más importante. En ese sentido, la Honda CB650R parte de los 8.650 euros, algo más frente a los 7.299 euros de la Yamaha MT-07, justificados con una mayor dotación electrónica y estética de referencia. Además, el modelo alado monta su icónico bloque tetracilíndrico de 95 CV de potencia frente a los 75 CV de la candidata del diapasón con motor bicilíndrico. Motivos de más para no tener en cuenta la diferencia económica desde un inicio.

Yamaha MT07.
La Yamaha MT-07 es más económica, con un diseño juvenil y urbanita / Foto: Neomotor
Como habéis podido comprobar, la potencia es otra de las claves decisivas en la compra de una motocicleta, mucho más que en un turismo. Como os hemos avanzado, la CB650R es más potente pero ambas cuentan con versiones limitadas de 35 kW y, por supuesto, cumplen con la normativa Euro5 de emisiones. Una evolución que ha ido “capando” no solo sus reacciones, también el sonido de escape que las hacía tan diferentes entre sí. Por suerte, los propios motores tienen algo de esencia y componen gran parte de la personalidad en una naked de este estilo.

Hablo, como no, de la ronca melodía, algo metálica, del bloque de cuatro cilindros de 649 centímetros cúbicos de la Honda. Unos acordes que irán subiendo de nivel a medida que estiras la marcha hasta las 12.000 vueltas, instante en el que entrega su máximo. Un pico que llega desde las 8.500 rpm, donde encontramos su par máximo de 63,5 Nm, y que concede esta sensación de gozo y placer de un acelerador sin fin. Dejarás de apretar el puño derecho por las multas, no por falta de caballería.

La Honda CB650R, en cambio, conquista por su motor tetracilíndrico y sonido / Foto: Neomotor
Nada que ver con el sonido mecánico y algo estridente del bicilíndrico de diseño crossplane de la MT-07. Un motor de 690 cc que te gana en un tramo de curvas y su entrega a partir de las 9.000 vueltas, cuando aparecen sus 74 CV de potencia. Este diseño de bloque permite alcanzar los 67 Nm de par máximo a 6.500 rpm, lo que la hace una moto más reactiva, juguetona y capaz de comerse un puerto de montaña solo con tercera.

Motores que hacen a la MT-07 más recomendable para iniciados, que no quieran complicarse la vida con el embrague entre curvas. En ese sentido, la CB650R es algo más exigente para poder exprimir al máximo la parte alta del cuentavueltas. También dependerá de tus gustos, o tu estilo a los mandos. En mi caso, prefiero aprovechar la parte media-baja y, por ese motivo, suelo sacar mejor provecho de un bicilíndrico antes que un tetracilíndrico como el de la Honda, que pide ir siempre arriba.

Mejor dotada

Más allá del motor, bicilíndrico o de cuatro cilindros, la CB650R está mejor equipada. También en la parte ciclo. El modelo alado cuenta con una horquilla invertida Showa de 41 mm con ajustes en la precarga y una función que separa el hidráulico en una barra y el muelle en otra de las barras. Eso la hace más ligera pero también eficaz ante una frenada contundente con una entrada a curva exigente.

CB650r
La parte ciclo de la CB650R es más completa y dispuesta para moteros expertos / Foto: Neomotor
En este sentido, la horquilla convencional Kayaba de la MT-07, con 41 mm de diámetro pero 130 mm de recorrido se quedará corta para los más expertos. No se puede regular, como sí lo hace el monoamortiguador trasero en precarga. Es, sin lugar a dudas, el defecto del modelo del diapasón, pero también su motivo de ser. Como naked de iniciación, el comportamiento es relajado, ágil y más fácil que el de la CB650R. Esta suspensión delantera la hace más ligera pero no aporta la misma confianza necesaria para entrar en curva fuerte.

La CB650R también tiene mejor sistema de frenos delantero, con dos discos flotantes y lobulados de 310 mm con pinza de cuatro pistones y anclaje radial. La nueva MT-07 ha mejorado respecto a la anterior, con doble disco de 298 mm pero dista mucho de la eficacia y contundencia del modelo alado. En el trasero, en cambio, la Honda apuesta por un disco de 240 mm de diámetro, frente a los 245 mm del disco monopistón de la Yamaha MT-07 que la hace más timoneable desde el pie derecho. Otra combinación en la parte ciclo que se resume en dos estilos de conducción diferentes.

MT-07.
La MT-07 es dócil, ligera y muy ágil, con un comportamiento más adecuado para "novatos"
Además, las unidades probadas montaban las gomas de serie, que son unas Dunlop Sportmax 120/70 y 180/55 para la Honda CB650R. Siendo unas Michelin Road 5 de 120/70 y 180/55 para la Yamaha MT-07. Como siempre tratamos de exponer en Nemotor, los neumáticos pueden suponer un antes y un después en una moto. Los Dunlop, frente a una carretera de curvas bien asfaltada y temperaturas de 33 grados en ambiente, dieron más confianza y agarre. Los Road 5 dieron buen resultado, con cambios rápidos y un apoyo estable en el ángulo sin sentirlo tan fundido con el asfalto.

Estilos muy distintos

Hemos dejado la parte de diseño para el final por un sencillo motivo: para gustos colores. El estilo de la MT-07 es más radical, urbano y juvenil, con una apuesta por el minimalismo y la tecnología en esta última actualización 2021. También han aprovechado para renovar su instrumentación digital, más intuitiva que nunca y de fácil lectura durante la conducción.

Dos naked muy distintas entre sí. Si te gusta una, difícilmente apostarías por la otra.
La CB650R, en cambio, está pensada para aquellos que quieren mostrar sofisticación, elegancia y estilo neo-retro en su moto. La instrumentación también es de nueva factura pero lo realmente importante es el consumo homologado, que ha bajado hasta los 5 l/100 km. Con los 15 litros de depósito podrías llegar a recorrer hasta 300 kilómetros, según lo homologado por la firma.

Su altura respecto al suelo, de 810 milímetros para la Honda y 805 mm para la Yamaha, las hacen accesibles a todo tipo de moteros de hasta 1,59 metros de altura (mi talla). Sin embargo, los estribos de la MT-07 quedan justo en el medio al bajar las piernas, lo que la hace más incómoda en parado o para maniobrar desde arriba. También su posición es más relajada, con el torso y las piernas colocados en posición sentada, mientras que la CB650R apuesta por una distribución algo más radical sin llegar a ser deportiva. Eso sí, la Honda pesa casi 20 kilogramos más.

Las Yamaha MT-07 y Honda CB650R comparten segmento, pero poco más. Por ese motivo era relevante este comparativo. Sus motores las hacen adecuadas para pilotos con estilos dispares, así como su parte ciclo es más recomendable para un usuario recién llegado, en el caso de la MT-07, o alguien con más experiencia sobre la moto, con la CB650R. Esta última se siente más madura, estable y trabajada, mientras que la del diapasón acaba siendo una de las mejores recomendaciones por su relación calidad-precio.

Si tuviera que decidirme por una, me quedaría con la Honda CB650R por su diseño y parte ciclo.
Eso no quiere decir que no puedas hacerte con un modelo alado si tienes el carnet A2, ni mucho menos. Su dulzura te permitirá aprender sin agobios y con una dotación mayor en el apartado de suspensión y frenada. Tampoco reduce el público de la MT-07 al novato, ya que tu ritmo y estilo sobre la moto puede ser el adecuado para su parte ciclo y no llegar a notar jamás esa holgura en el eje delantero de la que hablaba. Una “debilidad” que puede ser reforzada gracias al amplio aftermarket del modelo, abaratando la compra en un primer instante y permitiendo una personalización mayor.