Jeep Wrangler 4xe: ¿Tiene sentido como único coche?
Entre los aficionados a la automoción existe una jerga concreta, como la de los ‘futboleros’ o aquellos que siguen de cerca las tendencias de la moda. Cuando hablamos de un daily nos centramos en aquellos coches con una función práctica para el día a día, bien sea por su consumo, tamaño compacto o coste de mantenimiento. Son, por tanto, vehículos más económicos y no suelen llamar la atención. Sin embargo, unos pocos opinamos que la discreción está reñida con la pasión, de modo que tener un Jeep Wrangler 4xe como coche de diario puede ser una buena idea. ¿Es eso cierto?
Nadie se esperaba la introducción de la electrificación en el 4x4 más popular del mercado, pero son otros tiempos. El todoterreno americano debe adaptarse a la era de la concienciación por el medioambiente, ese del que tanto disfruta cuando saca su lado más salvaje y capaz como auténtico modelo off-road.
Si quieres leer sobre un Jeep que sigue quemando gasóleo, tu coche es el Jeep Gladiator con el propulsor V6 Multijet de 264 CV, pero en este artículo hablaremos de eficiencia, etiqueta cero de la DGT y ventajas o desventajas del sistema PHEV.
Un Wrangler como coche de diario
La premisa de esta prueba era comprobar si el Jeep Wrangler 4xe Rubicon podía utilizarse como coche para el día a día. ¿Por qué? Porque últimamente las calles de Madrid son el hábitat de este icono de la aventura y los desafíos más complejos. Comprobamos sus capacidades 4x4 durante la Jeep Academy, pero su etiqueta azul (cero) de la DGT lo ha situado en el radar de aquellos que quieren circular sin restricciones por las ciudades españolas.
La denominación 4xe identifica a los modelos híbridos enchufables de la firma. En este caso, su sistema de propulsión tiene una potencia total de 380 CV, aportados por el bloque gasolina 2.0 de 272 CV y dos motores eléctricos. El primero va acoplado a la caja de cambios, tiene 145 CV y puede encargarse de mover el coche hasta los 130 km/h, mientras que el segundo sustituye al alternador y motor de arranque (63 CV).
La batería es de 17,3 kWh y la autonomía eléctrica de este Wrangler PHEV es de 45 kilómetros. Es merecedor, por tanto, de ese distintivo ambiental, pero también de una aceleración superior frente a otras alternativas de combustión al contar con este segundo bloque eléctrico. El tiempo de carga real ha sido de poco más de 2,5 horas en una toma de 7,4 kW.
¿Cómo se conduce un Jeep Wrangler 4xe?
Si tus trayectos diarios no superan los 35 kilómetros, podrías, con mucho mimo y conducción eficiente, completar tu jornada sin consumir nada de gasolina. Para ello, deberás elegir el modo Electric en la botonería situada en el lado izquierdo del volante. Si tus rutas superan ese rango, lo mejor es optar por el modo Hybrid para aprovechar el aporte de energía en la reducción de combustible de manera automática. El modo e-Save mantiene el % de batería, o lo incrementa, utilizando únicamente el motor de combustión.
La sensación de circular en semejante 4x4 en silencio es, cuanto menos, curiosa. Sin embargo, nuestro día a día exigió apostar por el modo híbrido y la insonorización no es su fuerte. Tanto los cambios entre propulsión (motores), como los neumáticos BF Goodrich Mud Terrain T/A y la capota de lona lo convierten en un coche con una calidad de rodadura baja en carretera asfaltada. A cambio puedes tener un descapotable, pero su accionamiento es manual y algo ardua al principio.
Además, pese a los 4,1 l/100 km homologados como consumo (WLTP), en cuanto se agota la batería, su gasto se dispara por encima de los 11 l/100 km. Un dato obvio teniendo en cuenta su empuje y su carrocería cuadrada de 4,88 metros de largo por 1,89 m de ancho y 1,90 m de alto. Factores que lo descartan de lleno como daily pero, ¿Dónde han quedado los sueños de pequeños?
Un coche aspiracional y todoterreno
Efectivamente, el Jeep Wrangler sigue siendo el 4x4 que ocupa la mente de muchos aventureros, pero el garaje de unos pocos. El modelo probado era el Rubicon, que es imprescindible si quieres impresionar al personal, parte de los 88.313 euros en el configurador de la firma. Otro atributo de descarte.
De modo que a la cuestión que justificó esta prueba, sobre la lógica (o no) de tener un Jeep Wrangler 4xe como vehículo de diario, la respuesta coherente sería que no. La razón ocupa gran parte de nuestro camino, en el que tenemos que elegir una profesión, buscar una relación estable, comprar una casa, tener una familia y cumplir con ciertos compromisos sociales.
Incluso siguiendo ese patrón, puedes ser más feliz al bajar al garaje, cargar el carro de los niños en el maletero de 533 litros de capacidad y escapar de vez en cuando de la rutina. En cuanto a libertad, el Wrangler 4xe sigue siendo un auténtico 4x4. La instalación de la batería no ha restado profundidad de vadeo, que sigue siendo de 76 centímetros, y los ángulos apenas han cambiado:
En esta era con etiqueta cero, el Wrangler mantiene el sistema Command-Trac con diferencial central, así que puedes ir en tracción trasera o total y apostar por la reductora y el control de descensos en tramos muy complicados. También tiene el modo 4H Part Time, pero el diferencial trasero es opcional.