4 formas de conducir que deberías evitar en España si no quieres ir a la cárcel
Cuando conducimos nuestro vehículo hay siempre una serie de directrices que debemos seguir para poder viajar seguros y no ser un peligro en la carretera. Entre las principales y más conocidas está sin duda haber descansado bien, no conducir bajo los efectos de las drogas o el alcohol y respetar la señalización marcada por la vía.
Sin embargo, muchos conductores no están lo suficientemente concienciados con la seguridad y sólo se guían por las multas que pueden ponerles. Si eres de los que sólo se preocupan por las sanciones que pueden ponerte cuando conduces, te traemos 4 formas de conducir que, según la International Drivers Association, podrían incluso llevarte a la cárcel.
1. Conducir rápido
La velocidad es uno de los mayores problemas que tienen los conductores españoles en las carreteras, y es que a pesar de las diferentes campañas que hace la DGT para que no se corra al volante o los numerosos radares que podemos encontrarnos por todo el país, muchas personas circulan a velocidades más altas que las que permite la vía.
La velocidad es uno de los principales motivos de accidente, y es que, según un estudio del Foro Internacional de Transporte solo en el año 2020 la velocidad inadecuada contribuyó al 9% de los accidentes con heridos y al 25% de los accidentes mortales en nuestro país.
Por otro lado, en cuanto a las sanciones, estas infracciones pueden llevar a cargos criminales, multas elevadas y hasta seis meses de cárcel. Lo que está claro es que no merece la pena poner en riesgo tu vida y la de los demás por llegar un poco antes a tu destino, por lo que debes conducir con cuidado.
2. Conducir lento
En la otra cara de la moneda, conducir lento también está considerado como motivo de multa aunque muchos no lo crean. Pero no debes confundirte, no hablamos de aquellas personas que, por ciudad, conducen un poco más despacio cuando están buscando un hueco para aparcar o simplemente porque no tienen la confianza suficiente en su conducción.
Hablamos de los conductores que, en carreteras en las que la velocidad requerida es alta, circulan muy por debajo de la velocidad mínima permitida, pudiendo causar retenciones o incluso accidentes. Para aquellos que en ciudad también sigan esta conducta y puedan poner en peligro a otros conductores, la multa también puede ser la misma.
3. Música al volante
A todos nos gusta conducir escuchando un poco de música, un programa de radio o incluso teniendo una buena conversación. Sin embargo, el entusiasmo que te produzca la música que escuchas o las alteraciones que surjan de una discusión deben contenerse cuando estás al volante. Cualquier música que se reproduzca tan alta que pueda distraer al conductor o molestar a otros en la carretera puede ser sancionada por la ley si los Agentes de Tráfico lo consideran necesario. Por supuesto, el uso de auriculares está prohibido.
4. Comer mientras conduces
Otro de los casos en que pueden multarte es el de comer al volante. Aunque a veces cueste admitirlo, todos le hemos dado un trago a una botella de agua mientras conducíamos o hemos comido un par de patatas de la bolsa que tenía el copiloto en la mano. Sin embargo, estas actitudes pueden llegar a ser muy peligrosas, sobre todo si hablamos de comidas más contundentes en las que tus manos estén completamente ocupadas.
Si los Agentes consideran que comer al volante está quitando tu atención de la conducción puedes ser multado y hasta podrían quitarte 6 puntos de tu carnet de conducir. Además, mientras comes o bebes podrías estar quitando la vista de la carretera, lo que es peligroso y podría hacerte perder el control.