BMW Protection: así se fabrican los coches blindados

En 1978 BMW lanzó el 773i High Security, la primera generación de vehículos de seguridad producidos por la firma bávara. En 1995 abrió las puertas de su programa BMW Protection al mercado internacional y, desde entonces, han sido muchas las incorporaciones a su oferta de modelos reforzados. Actualmente, el BMW Serie 7 Protection y el BMW X5 Protection han alcanzado la cúspide de la protección, con los niveles VR6 por parte del todocamino y VR9 para la berlina, que también se ofrece en su variante 100% eléctrica.

Tal como nos explicaron durante su presentación, la homologación VR6 asegura una protección casi total ante las balas, pero también se puede reforzar su faceta antiexplosivos como opción. La jaula o célula de seguridad implica un aumento considerable del peso, por lo que deben estar equipados con los propulsores más prestacionales de la firma bávara.

Hablamos, cómo no, del imponente V8 de 4.4 litros Twin Turbo que dota a estos vehículos de representación de 530 CV de potencia y 750 Nm de par máximo. Lógicamente, el depósito de gasolina está reforzado y tiene un sistema de autosellado en caso de impacto de bala. Además, la suspensión adaptativa M ha sido ajustada al peso, del mismo modo que los sistemas de freno M Sport.

El BMW i7 Protection es más de lo mismo, pero con un sistema de propulsión eléctrico que alcanza los 544 CV y 750 Nm de par. Al peso de las baterías, debemos sumar el extra de refuerzo y protección de un blindado, así que estamos ante una berlina de casi cuatro toneladas de peso. Por ese motivo, la aceleración es de 9 segundos y su autonomía alcanza los 340 kilómetros, con una velocidad máxima de 160 km/h. No parece la mejor herramienta ante un ataque con armamento pesado, pero sí sirve como una demostración de lo que puede hacer BMW Protection.

Un programa que no solo se dedica a crear coches blindados, también trabaja con los conductores. En estos cursos de conducción específicos se tratan situaciones de riesgo extremo, tanto en el apartado de la esquiva y huida como en la solución de problemas críticos.

Escenarios en los que nuestras autoridades se pueden ver implicados y para los que requieren, también los cuerpos de emergencias, vehículos como los desarrollados por BMW desde hace ya seis décadas. En España, por ejemplo, la Guardia Civil posee casi 300 unidades de la versátil BMW R 1200 RT, encargadas de mantener el orden y ponernos los pelos de punta al verlos por la carretera.

Casi todos los modelos de la gama, desde un Serie 1 hasta un X5, son susceptibles de pasar por un BMW Autority Vehicle y se fabrican en las mismas líneas de producción que el modelo convencional. En esa planta se introducen los refuerzos o modificaciones pertinentes, dejando la rotulación para empresas especializadas en cada país de destino.